Hemos dicho anteriormente que el año pasado fue muy complicado para la industria automotriz nacional en general, al punto que la contracción llegó al 29%; sin embargo, en el rubro de los vehículos de “nuevas energías”, como llaman ahora los chinos a los híbridos y eléctricos, el panorama fue diferente.
En el consolidado a cierre de diciembre se reportaron 31.500 unidades nuevas híbridas y eléctricas y ello supone un crecimiento del 13,1%, con respecto al registro de 2022. Tales cifras indican que actualmente los vehículos HEV, PHEV y BEV suponen una participación de mercado del 16,9%, algo realmente admirable. Al hacer clic en el rubro de los 100% eléctricos, el balance fue de 3.677 unidades nuevas matriculadas en el 2023, lo que implica un crecimiento del 12,2%, según el boletín de sector de Fenalco-Andi.
Esa dinámica motivó a que el año pasado se lanzaran en el mercado local más de 20 modelos 100% eléctricos, entre ellos el mencionado Renault Kwid E-Tech, que comenzó una exitosa preventa nacional en junio pasado; de hecho, en apenas dos semanas se lograron más de 300 reservas, pero formalmente los entusiastas debieron esperar hasta el Salón del Automóvil de Bogotá 2023 para, entonces sí, darle luz verde en nuestro mercado.
Si bien el Kwid no es el primer EV de la marca francesa en Colombia, pues también se ofrecen otros modelos a baterías, como el Twizy, el Zoe y la Kangoo; se trata del compacto eléctrico más asequible y con mejor proyección para el mercado local, si consideramos su precio. En este caso, el nuevo eléctrico de Renault llega para competir con modelos como Changan E-Star y JAC E10X.
Acá vale decir que, pese a que llegó a los concesionarios nacionales apenas a finales del año pasado, la campaña de expectativa y la preventa le permitieron al Kwid E-Tech consolidarse como el Auto del Año en el segmento de vehículos 100% eléctricos, de los Premios Autocosmos 2024. La marca debe aprovechar ese buen impulso de entrada para
Renault Kwid E-Tech: características
En la nota del lanzamiento de la estrategia E-Tech de Renault, que supuso el comienzo de la preventa del Kwid eléctrico en Colombia, les contamos los principales detalles de este hatchback, por lo que en este artículo no nos extenderemos en el tema. En términos de diseño general, recordemos que este modelo eléctrico es básicamente igual a la más reciente versión de su hermano a gasolina, que se presentó a mediados del 2022 en el país, solo que con algunos acentos distintivos que nos hacen notar que se trata de una versión con movilidad 100% a batería; el cambio más radical es el de la parrilla, obviamente cerrada y que se decora con apliques metalizados.
Acá vale resaltar que, acertadamente, el acceso al puerto de carga se oculta detrás del rombo de la marca que decora el frontal. Otro detalle es que sobre los tradicionales apliques de fondo oscuro que abarcan el ancho de las puertas en la parte inferior, se inscribe el texto “E-Tech”, que hace alusión al nombre de la nueva familia eléctrica de Renault y que resalta con los rines bitono de 14”; también se cuenta con luces DRL con tecnología LED y luz antiniebla trasera.
En cuanto a dimensiones, el Kwid es 84 milímetros más largo que el JAC E10X y 36 mm más corto que el Changan E-Star, pero el modelo de Renault supera a este último en cuanto a distancia entre ejes: 2.423 mm frente a 2.410 mm. El Kwid también es más ancho que sus rivales (+100 mm vs. el E10X y +120 mm vs. E-Star).
El bien aprovechado habitáculo, ideal hasta para cuatro pasajeros, permite configurar un área de carga de 290 litros, que se puede ampliar hasta los 1.100 litros, cuando se abate la silla posterior
Frente a su hermano de gasolina, los interiores son también básicamente los mismos y solo encontramos diferencias en el cuadro de instrumentos, que, como es lógico, nos entrega información referente al consumo de batería y el estatus del flujo de la misma mientras avanzamos, la información desplegada es simple, concreta y clara. Otro cambio obvio es la ausencia de la barra de cambios, que se reemplaza por un selector giratorio con tres letras (D, N y R).
En cuanto a conectividad tenemos una pantalla táctil de 7 pulgadas con replicación de celulares Android Auto y Apple CarPlay, pero se requiere uso de cable; así mismo, cuenta con dirección con asistencia eléctrica, aire acondicionado, limitador de velocidad, cuatro vidrios eléctricos, alerta de presión de llantas, retrovisores eléctricos con repetidor de dirección incluido, sensor y cámara de reversa, así como regulación de altura de los faros, entre otros.
Renault Kwid E-Tech 2024: tren de potencia
Justo aquí es en donde las especificaciones técnico-constructivas del Kwid cambian, en el vano del motor, en lugar del bloque tricilindros térmico que anima a sus hermanos, aparece un propulsor eléctrico incluso más compacto que el motor a gasolina; de hecho, creemos que con una mejor disposición de los elementos se pudo acomodar un frunk, un minicompartimento de carga que se integra en esta área en ciertos EV.
El corazón del Kwid E-Tech es un motor síncrono de imanes permanentes y con reductor integrado, que se alimenta de una batería de iones de litio de 26,8 kWh; el sistema entrega 48 kW (65 hp) de potencia máxima y 113 Nm de torque. Frente al JAC, el Kwid lo dobla en potencia (el E10X tiene apenas 30 hp), pero este último ofrece mejor torque (149 Nm) y algo más de capacidad en la batería (31,4 kWh). Con respecto al rival de Changan, el Kwid tiene 9 hp y 57 Nm menos que el E-Star, mientras que la capacidad de la batería de este último es de 32,2 kWh.
A quienes les encanta comparar fichas técnicas les ofrecemos algunos datos interesantes; por ejemplo, el peso: Kwid (977 kilos), EX10 (1.160 kilos) y el E-Star (1.180 kilos); con respecto a la autonomía, el auto de JAC promete 360 kilómetros (sin especificar que tipo de medición se empleó), 300 kilómetros el de Changan (ciclo NEDC) y 298 kilómetros el Kwid (norma SAE J1634).
En el eléctrico de Renault se dispone de tres modos de carga: el más práctico es la opción de la usar una toma casera convencional de 110 vatios AC, para ello se usa el cargador portátil que viene con el auto y ofrece una potencia hasta de 1,1 kW, la segunda posibilidad es recurrir a un cargador de pared (AC) y entonces la potencia asciende hasta 7 kW y finalmente existe la posibilidad de conectarlo a una estación de carga rápida (DC) y allí la potencia es de hasta 30 kW; en este caso, recargar la batería desde 15% al 80% puede tomar unos 40 minutos.
Renault Kwid E-Tech 2024: manejo
Para emprender el movimiento hay que hacer algunos pasos muy simples, el primero y el más particular de ellos es que se debe introducir una llave tradicional (en esencia, igual a la de cualquier Kwid de comsbustión) en el encendido que está en el lugar habitual, al lado derecho de la columna de la dirección; lo interesante es que hay que insertar la llave y girarla sobre su eje, cuando eso sucede el cuadro de instrumentos se ilumina y hasta que aparece un testigo que dice “Ready” se debe soltar la llave; en ese momento nuestro Kwid E-Tech puede iniciar la marcha, para ello hay que colocar el selector en D y desacoplar el freno de mano, que también es de accionamiento tradicional.
El tacto y la sensación de arranque es similar a la de cualquier eléctrico, con una respuesta rápida y silenciosa. En el cuadro de instrumentos hay un indicador luminoso (que se ubica en el mismo lugar donde su hermano térmico tiene el tacómetro) que se ilumina a medida que vamos presionando suavemente el acelerador. Si el conductor acelera a fondo, por ejemplo, en una maniobra de adelantamiento, el indicador se ilumina por completo e incluso se activan dos indicadores más que dicen Power; es una señal de que se usa toda la entrega de energía de la batería disponible en ese momento.
En la consola central y alojado en la zona de controles donde se accionan los elevadores eléctricos delanteros hay una tecla que dice ECO, al presionarla accedemos al programa donde la entrega de energía es más gradual, incluso la gestión del motor entrega menos poderío al tener el modo ECO activado; en este caso, en lugar de tener disponibles el equivalente a 65 hp solamente disponemos de 44 hp, potencia más que suficiente para la movilidad urbana; además, al tener este modo de manejo activo también se gestiona una mayor regeneración de energía, que va de regreso a la batería.
En cuanto al funcionamiento del sistema de regeneración de energía (que no tiene opción de regular los niveles de gestión), imaginemos que circulamos a una velocidad crucero de 50 km/h con el modo ECO activado; en ese caso, cada vez que levantemos el pie del acelerador será notoria la sensación de desaceleración y en el indicador de poder se encenderán dos testigos en forma gradual, con lo cual se nos informa que estamos convirtiendo energía cinética (movimiento) en energía eléctrica y esta se transfiere a la batería. Aprender a “jugar” con este recurso es muy conveniente en los descensos, pues a medida que el auto rueda por inercia aumenta la autonomía eléctrica de forma significativa.
Las sensaciones al volante son muy parecidas a las de un Kwid de gasolina, en cuanto a su capacidad de rodar por el tráfico más denso y en calles estrechas. Nos gustaría que transmitiera algo más de tacto la dirección, pero no es nada crítico y se agradece en todo caso la asistencia eléctrica.
En lo que sí nos parece que gana más puntos el Kwid EV frente a su hermano de combustión es en lo mejor que se afianza sobre el pavimento cuando se le exige en curvas demandantes y en maniobras evasivas; esto se debe a que el peso del paquete de baterías baja el centro de gravedad del vehículo y lo afirma mejor en la vía.
Además, el Kwid E-Tech se favorece de un acertado reglaje de la suspensión y de una buena distancia de despeje (166 mm), por lo que tiene 41 mm y 29 mm más de separación al piso que el JAC y que el Changan, respectivamente; esto permite que supere sin ningún problema los baches y obstáculos urbanos.
Finalmente, en el tema de seguridad, el Kwid eléctrico adopta recursos como frenos ABS, control electrónico de estabilidad, control de tracción, limitador de velocidad, alerta de presión de llantas, anclajes Isofix, seis airbags, asistencia al arranque en pendiente y alerta de presencia para peatones, entre otros.
Definitivamente, la apuesta de Renault es interesante, puesto que se trata de un vehículo similar al que conocemos desde hace años, pero con otro tipo de motorización; con eso el Kwid es el único en ese rango de precios (en torno a los 100 millones de pesos) en ofrecer una gama completa de mecánicas térmicas y eléctricas del mismo modelo. Sin demeritar a sus competidores, otro de los puntos fuertes del Kwid E-Tech frente a sus competidores chinos es que, aparte de ofrecer modelos eléctricos desde hace varios años, la marca francesa tiene consolidada una robusta red que supone total respaldo a nivel nacional.