Considerando la revolución en el segmento de automóviles de entrada que supuso la llegada del nuevo Renault Kwid al país, se presentan interesantes movimientos en esta franja de precios, que parte desde los 30 millones. Precisamente, en esta ocasión analizaremos una de las mejores ofertas que llega a ese nicho, el Fiat Mobi, modelo desarrollado por la filial de Fiat en Brasil y que está orientado para los mercados emergentes de la región.
Practicidad, estética y economía son los principales argumentos de este subcompacto de Fiat, que, para ser sinceros, estaba demorado en llegar a Colombia, considerando que fue presentado en la región en 2016.
Si usted es de los que busca una opción práctica y urbana de vehículo alterno para evadir el Pico y Placa o es el padre de algún joven a quien le desee regalar un automóvil para que vaya a la universidad, el Fiat es una buena alternativa a tener en cuenta. La marca lo ofrece en el país en tres versiones: Mobi Easy POP ($29.990.000), Mobi Easy ($33.990.000) y Mobi Way ($35.990.000).
La pinta es lo de más…
El diseño es una de las principales fortalezas de este modelo, que evidencia el inconfundible ADN de la marca itaiana, ofreciendo una imagen robusta, moderna y muy atractiva. Se caracteriza por un frontal amplio y elevado, con un estilizado grupo óptico delantero de luces halógenas; el conjunto ofrece total identidad con los demás modelos del portafolio Fiat. En la vista lateral resaltan los dimensionados guardabarros y atrás, lo más llamativo es el exclusivo detalle de adoptar una quinta puerta completamente hecha en vidrio templado y de alta resistencia, de cinco milímetros.
Los rines de 14” vienen de serie en las tres configuraciones, pero son de aleación de aluminio en las versiones Easy y Way, estas también añaden retrovisores externos de ajuste eléctrico, espejo del lado del pasajero con función tilt-down, sensor de estacionamiento trasero y luces exploradoras. Por su parte, el modelo más equipado (Way) ofrece exclusivos detalles exteriores, como extensiones para los guardabarros y barras longitudinales de techo, que le dan un sabor más crossover.
En todo caso no se confundan, con todo y la bonita imagen aventurera de la versión Way, este Fiat no quiere presumir lo que no es; su propuesta mecánica y configuración lo orientan como un subcompacto urbano por excelencia, una promesa que cumple a cabalidad.
Buen nivel de equipo a bordo
Antes de hablar de su desempeño, veamos que encontramos en la cabina del Mobi. Lo primero a destacar es que a pesar de sus compactas dimensiones (tiene 3,56 metros de longitud y 1,63 metros de ancho) el habitáculo resulta más bien amplio; en general, el ambiente y ciertos detalles del interior, como los controles de la climatización, son similares a los del Fiat Uno. En todas las versiones se cuenta con sillas tapizadas en tela, con un bonito diseño y costuras blancas que contrastan con los tonos grises empleados.
En el tablero y la consola los plásticos son de aspecto y tacto un tanto rústico, pero que resultan ideales para la limpieza. Por su parte, todas las unidades cuentan con volante regulable en altura y en el caso de las versiones Easy y Way, la posición de manejo está favorecida por contar con reglaje en altura para la silla del conductor.
Aunque solo hay apoyacabezas en los extremos de la banca posterior es posible acomodar allí a tres pasajeros, siempre y cuando sean de estatura y corpulencia media. Considerando que en el Mobi se privilegia la comodidad del ocupante, es importante anotar que el área destinada al baúl ofrece una capacidad de 245 litros, apenas justa para guardar objetos pequeños; si se requiere más espacio, se debe aprovechar que la banca posterior abate en proporción 60/40.
Considerando la gama donde compite, el equipo a bordo de serie del Fiat Mobi es más que correcto, incluso desde la versión de entrada, cuenta con: vidrios eléctricos delanteros con función “One Touche”, cierre centralizado de puertas, direccionales con función de cambio de carril, sistema de audio con pantalla táctil de 7” (con sistema Android; en todo caso, hay una entrada USB en la guantera por si se quiere conectar otros equipos). Aquí un detalle por mejorar es que el volante no tiene mandos satelitales para manejar el radio, por lo que todo toca hacerlo directamente en la pantalla central y eso puede hacer perder la concentración del conductor.
En el listado a bordo también contamos con un panel de instrumentos monocromático de 3,5” con diferente información del computador de abordo (consumo, distancia recorrida y temperatura del motor). El modelo que tuvimos a prueba fue el Easy, por lo que no tenía la consola de techo con portagafas y espejo auxiliar que incluye la versión Way; sin embargo, en este caso, dicho accesorio reposa sobre la manija de acceso, arriba de la puerta y los espejos están montados en la parte posterior de los parasoles individuales de las plazas delanteras.
En materia de seguridad, aspecto que se ha vuelto neurálgico en este segmento, el Fiat Mobi ofrece recursos como: doble airbag delantero, frenos ABS con distribución electrónica de frenado (EBD), anclaje Isofix para sillas infantiles y sistema Follow Me Home, que durante un tiempo mantiene encendidas las luces del auto después de cerrar el vehículo. Otro detalle destacable en seguridad es la adopción del sistema Emergency Stop Signaling (ESS), que se activa al frenar con mucha fuerza y de repente, lo que automáticamente activa las luces estacionarias como señal de advertencia para los demás conductores.
¡Qué placer conducir en la ciudad!
Este subcompacto, desarrollado por el Grupo Fiat Chrysler, se impulsa con un motor de cuatro cilindros y un litro de cilindrada, de ocho válvulas y baja fricción, que genera 68 caballos de potencia y 9,4 kg-m de torque máximo, el cual entrega a las 4.250 rpm. De entrada digamos que un propulsor de cuatro clilindros, como el del Mobi, no vibra tanto como uno de tres, lo que es un punto a favor para el producto de Fiat sobre su rival de Renault.
Como bien se promociona, el Mobi está concebido para la movilidad urbana, por lo que acelera sin mucho afán y ofrece una sensación de marcha más orientada hacia la comodidad, considerando que su motor solo tiene dos válvulas por cilindro. Con un peso vacío de 939 kilos, en la versión Way, el Fiat Mobi entrega una relación peso/potencia de 13,81 kilos por cada caballo.
En nuestra prueba recorrimos 270 kilómetros a bordo del Fiat Mobi Easy y obtuvimos un consumo mixto promedio de 47,03 kilómetros por galón; en todo caso, se debe tener en cuenta que viajamos con el cupo pleno y que al desplazarnos en carretera lo exigimos en los ascensos para no perder ritmo. En circuitos urbanos, que es para lo que fue concebido, el Mobi optimiza su consumo por lo menos un 15% más de lo que obtuvimos.
Las relaciones de caja del modelo de entrada de Fiat son relativamente largas, exigiendo que el conductor las utilice conveniente y frecuentemente para optimizar su poderío, sobretodo cuando se requiere hacer sobrepasos o en ascensos. En cuanto a la dirección, el esquema tiene asistencia hidráulica y resulta maniobrable, pero nos sorprendió que a pesar de sus contenidas dimensiones su diámetro de giro fuera mayor del esperado: 9,96 metros.
Como decíamos, este proyecto de Fiat nació para satisfacer las demandas de mercados emergentes de la región, por lo que la suspensión se concibió muy sólida: adelante el esquema es McPherson y atrás se apoya en un eje de torsión, todo el esquema está concebido para absorber muy bien las imperfecciones de la vía, a lo que suma además una distancia de despeje al suelo de 17 cm, por lo que el Mobi supera sin problema baches y obstáculos citadinos.
Por su diseño y bienestar interior, el nuevo Fiat Mobi tiene todos los argumentos para conquistar la preferencia de los usuarios más jóvenes, mientras que por su desempeño y consumo, de clara orientación urbana, puede considerarse una opción atractiva para un comprador más racional.