Emocionante, energizante e impresionante. Al menos así lo sienten en Mercedes-AMG, quienes estan orgullosos de presentar en Mónaco al AMG PureSpeed, un adelanto del que será el primer modelo de la línea MYTHOS (quieren que se escriba todo en mayúscula) que tendrá una partida limitada de 250 unidades, solo para exclusivos coleccionistas y cercanos a la marca, durante el próximo año.
“El conceptual Mercedes-AMG PureSpeed ofrece un vistazo de lo que probablemente sea la forma más directa de experimentar el rendimiento y el placer de conducir. Radicalmente abierto, ni un techo ni un parabrisas separan a los dos pasajeros de los elementos naturales. Puedes experimentar la luz, el aire y la pasión, con todos tus sentidos. Como el concepto de nuestro primer vehículo MYTHOS, encarna el nivel más alto de exclusividad. Elementos de diseño como el Halo también crean una sensación de Fórmula 1. Por lo tanto, no hay mejor lugar para su estreno mundial que Mónaco.” dice Michael Schiebe, Presidente del Consejo de Administración de Mercedes-AMG GmbH y Jefe de las divisiones Mercedes-Benz G-Class y Mercedes-Maybach
Sistema Halo en lugar de paral delantero
Reinterpretando a los speedsters clásicos que usualmente tienen un parabrisas vestigial, Mercedes-AMG dispuso en este auto un Halo, tal como en la F1, pero más alargado. Este se diseñó aerodinámicamente en función de las líneas de este modelo y se conecta directamente a la carrocería del auto. Además, este PureSpeed incluye dos cascos aerodinámicamente optimizados, que se diseñaron y fabricaron para hacer juego con el modelo. De todos modos, Mercedes dotó a la cabina con algunos deflectores para desviar el viento.
En la cabina, obviamente se recogen elementos del Mercedes-AMG SL, modelo que presta su base para este proyecto, pero con conceptos de color únicos y un reloj personalizado diseñado por IWC Schaffhausen en el tablero.
Diseño que se inspira en el Mercedes-AMG ONE
Muchos de los elementos de diseño se inspiraron en el Mercedes‑AMG ONE: partes de fibra de carbono visibles, técnicas y afiladas en la sección inferior del vehículo, que contrastan fuertemente con las formas más suavizadas de la parte superior. El estilo de las ruedas se caracteriza por el revestimiento de fibra de carbono en las cubiertas de los rines delanteros y traseros; las cubiertas traseras están completamente cerradas para mejorar la aerodinámica, mientras que las delanteras están abiertas para optimizar el flujo de aire para la refrigeración de los frenos y la carga aerodinámica.
Típicos de un superdeportivo son el capó largo y la parte delantera muy baja, con una “nariz de tiburón” pronunciada, cuyo estilo es muy reminiscente al del AMG-ONE: no verás la parrilla Panamericana, tan solo una estrella sobre la punta rebajada, algo ya visto en un par de modelos exclusivos de Mercedes. Por su parte, el capó cuenta con una salida de aire en la parte superior, a la que se suman algunos elementos aerodinámicos, como deflectores y faldones.
Un color con historia
Los contrafuertes tras las butacas, tan típicos de estos modelos sin techo, rememoran a modelos históricos, como el 300 SLR, en el que Stirling Moss y Denis Jenkinson ganaron la Mille Miglia de 1955 en Italia, con una velocidad media récord de 157 km/h en carreteras públicas.
La llamativa pintura, en un degradado de color rojo Le Mans a gris grafito con un patrón AMG negro, alude al esquema de colores que usó el Mercedes que ganó la Targa Florio de 1924 en Sicilia; es decir, hace un siglo. Estaba pintado de rojo, un color típicamente reservado para los autos italianos y se usó por una razón muy estratégica. Los autos de carrera alemanes se pintaban tradicionalmente de blanco en ese momento. La pintura roja tenía la intención de disuadir a los aficionados locales de impedir el avance del auto en la carrera y por supuesto que el truco funcionó. Después de 6:32:37,4 horas y una distancia de carrera de 432 kilómetros, el Mercedes número 10 cruzó la línea de meta en primer lugar con Christian Werner al volante. Esa es la razón por la que el auto lleva el numero 10 en los fenders frontales.
Mercedes-AMG no confirma aún cuál será el propulsor escogido para este modelo: será un V8, pero no sabemos si el de 577 hp o el de 805 hp con asistencia híbrida.