En diferentes notas les hemos evidenciado el compromiso global de Renault con la movilidad sostenible a nivel global; de hecho, uno de los últimos anuncios fue la consolidación de ElectriCity, que supone el establecimiento de un ecosistema eléctrico compacto, eficiente y de alta tecnología en Francia que le permitirá a la marca francesa fabricar unos 400.000 vehículos eléctricos anuales a partir de 2025.
La aceleración histórica en la estrategia de vehículos eléctricos (EV) que realiza el Grupo Renault no tiene vuelta atrás y las cifras parecen avalar que ese es el camino correcto; por ejemplo, de acuerdo con datos del portal CleanTechnica, en el listado de los vehículos electrificados más vendidos el año pasado en el mundo, el tercer lugar lo ocupó el Renault Zoe (100.431 unidades), mientras que en la clasificación de marcas, el fabricante galo quedó en el séptimo lugar de la tabla, con 124.451 registros.
Precisamente desde su lanzamiento en 2013, la primera generación del Zoe se consolidó como uno de los principales líderes del mercado de EV en Europa y su arribo a Colombia se hizo a mediados de 2018. Fue justo en ese año que comenzó el salto exponencial en las ventas de los Battery Electric Vehicles (BEV) en el mercado local: en 2017 se matricularon 136 BEV, mientras que fueron 390 al año siguiente.
El buen Zoe ha sido clave para que Renault se posicione como líder del subsegmento de vehículos eléctricos a batería en Colombia, pues en el reporte consolidado a julio del sector automotor, elaborado por la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), la marca francesa totaliza 1.235 unidades, frente a las 846 que registra BYD, su más cercano rival.
En todo caso, se debe tener en cuenta que en el segmento de Híbridos y Eléctricos, los primeros se llevan la mayor tajada del pastel en Colombia (7.047 unidades matriculadas en el acumulado año hasta julio), mientras que los híbridos enchufables (PHEV) sumaron 807 unidades y los BEV acumularon 591.
Renault Zoe: dimensiones y exterior
Desde el punto de vista estético, la evolución del Nuevo Zoe con respecto al modelo que releva no es radical; el eléctrico francés mantiene esas formas fluidas y amigables que tan buenos comentarios genera en el Viejo Continente, en particular. El cambio más significativo es la renovada firma luminosa en forma de “C”, con faros y luces DRL de tipo LED; ello estiliza la mirada del modelo y favorece la percepción de que la carrocería es más grande.
En cuanto a dimensiones, el Zoe creció cinco centímetros a lo ancho (1,787 milímetros, sin espejos), pero mantiene los 4.087 milímetros de longitud, la altura (1.562 mm) y los 2.588 milímetros de distancia entre ejes. Pese a que la distancia mínima de la carrocería con respecto al suelo es de 120 milímetros, la verdad es que supera y acomete bien los baches urbanos, favorecido quizás por los rines de aluminio de 16” con los que se ofrece en la versión Zen, la única disponible en Colombia.
Otra diferencia estética que percibimos en este nuevo Zoe es que las carcasas de los espejos exteriores eléctricos adoptan el color de la carrocería, así como sucede con las manijas de las puertas. Un detalle a considerar es que al accionar la puerta del baúl, esta despliega hasta una altura de 2.028 milímetros, por lo que agarradera puede quedar muy alta para que accedan a ella personas de baja estatura.
Renault Zoe: interior y equipamiento
Con respecto al modelo que releva, el gran cambio del nuevo Zoe se evidencia en la cabina, que ahora no solo luce más moderna y fresca, sino que proyecta una imagen desenfada y más auténtica. El empleo de tonos oscuros, el mayor uso de acabos textiles y nuevos recursos tecnológicos a bordo, así como un completo y acertado rediseño del tablero (ahora de 10” de ancho y muy bien resguardado por una visera que favorece su visualización en cualquier condición de luz), hablan de un escalamiento acertado.
Desde su lanzamiento, el Renault Zoe se ha posicionado como un abanderado en la protección del medio ambiente y dicho compromiso, más allá de ser un vehículo 100%, abarca otras esferas; en este caso, el auto se vale de tapizados de diferentes materiales y texturas, fabricados con elementos 100 % reciclados, como fibras derivadas de botellas de plástico y textiles procedentes de la industria automotriz.
El juego de contrastes entre tonos y materiales resulta acorde para atraer a ese grueso de familias jóvenes y sensibles al tema medioambiental. Por otra parte, la buena reorientación del habitáculo permite ahora que los tres ocupantes traseros se acomoden en un espacio de 1.385 milímetros y deja 826 milímetros entre dicha banca y el techo; en el caso de las sillas delanteras, tal distancia es de 904 milímetros. Importante señalar que la banca trasera se puede abatir en proporción 1/3 – 2/3, lo que permite ampliar la capacidad de carga del baúl de 338 litros a 1.225 litros.
Así mismo, la adopción de amenidades y más recursos a bordo lo alejan de esa oferta un tanto espartana que caracterizó el interior del primer Zoe. Ahora, el vehículo eléctrico de Renault dispone de recursos como llave manos libres con desbloqueo de puertas por aproximación, retención auto hold, sun roof, climatización regulada, freno de parqueo automático, encendido automático de luces y de limpiaparabrisas, volante regulable en altura y profundidad, con controles activos, como control crucero, limitador de velocidad y comandos de voz.
Renault Zoe: recursos y tecnología
Decíamos que el panel de instrumentos digital es nuevo y además ofrece asistencias y parámetros específicos de la conducción eléctrica, incluyendo el eco-nómetro, que invita a la conducción responsable, al informarle al conductor sobre las prestaciones del frenado recuperativo de carga y optimizar su autonomía, la cual se estima en 395 kilómetros.
Otra novedad del Zoe es la integración del sistema Easy Link, que incluye una pantalla táctil semiflotante de 7”, la cual permite replicar la pantalla del smartphone y disfrutar de sus aplicaciones, a través de Apple CarPlay y Android Auto, solo que esto se debe hacer a través de cable, porque no es inalámbrico.
Este modelo eléctrico se vale de una nueva toma CCS2 (Combo tipo 2), oculta bajo el logo frontal de la parrilla, lo que permite cargar el auto en el Wallbox (cuyo precio está incluido con el auto) que se instala donde el cliente lo desee; a la vez, también es posible utilizar los puntos de carga rápida habilitados en ciertos lugares de la ciudad y recuperar así hasta 150 km de autonomía en tan solo 30 minutos. También acoge un cargador para usar en terminales de corriente alterna.
Renault Zoe: seguridad y motorización
Así como en la versión pasada, el nuevo Zoe cuenta con cuatro airbags, frenos ABS (ahora hay frenos de disco en todas las ruedas) con sistema de asistencia a la frenada de emergencia (SAFE), control dinámico de trayectoria (ESC) con función anti-patinado (ASR) y repartidor electrónico de frenado (EBD); son novedad el asistente de arranque en pendiente (HSA) y el asistente de luces altas y bajas (AHL).
Así mismo, cuenta con sensores de parqueo adelante/atrás, aviso sonoro para advertir su presencia a los peatones, cámara de reversa y kit de reparación en caso de pinchazo, por lo que también dispone de detector de presión de aire en las llantas. En realidad, la capacidad y la gestión de frenado están al nivel de sus prestaciones, por lo que transmite mucha seguridad en la vía.
La renovación también incluye el reemplazo del motor eléctrico R90 por el nuevo propulsor R135, que entrega 100kw, equivalentes a 135 hp en un motor térmico (en el Zoe anterior esta equivalencia era de 92 caballos). En este caso, el torque es de 245 Nm (+25 Nm que en la primera generación) y con ello se logra una aceleración de 0 a 100 km/h en 9,5 segundos y una velocidad máxima de 140 km/h.
Renault Zoe: desempeño
Puede que el nuevo Zoe luzca muy parecido a la carrocería de su antecesor, pero debajo hay mucha evolución; de hecho, convenientemente se renovaron cerca de 70 componentes que integran el controlador electrónico de potencia (PEC, por sus siglas en inglés), para soportar los mayores registros de potencia y torque.
Otra importante novedad es la incorporación de la nueva función “B” (b-mood), la cual le permite al Zoe incrementar la intensidad de frenado regenerativo; en este caso, con solo dejar de accionar el pedal del acelerador el auto comienza a frenar y se activa el sistema regenerativo. A ello se suma que la gestión de los cambios se favorece con la nueva palanca e-Shifter.
El bajo centro de gravedad y un peso total de 1.559 kilos hacen brillar la nueva motorización del Zoe, que ahora apropia un paquete de baterías de 52 kWh (el del modelo anterior era de 41kWh), el cual optimiza el uso de sus celdas y brinda mayor densidad energética. Con su actualización tecnológica, el Zoe acentúa su carácter ágil y fluido para el tráfico urbano; su mejor torque es evidente en los arranques y en los sobrepasos, cuando lo requiera no dude en accionar hasta el fondo el acelerador para que responda en consecuencia.
El reglaje de la suspensión está orientado para los mercados europeos y ello hace que resulte un tanto duro y se resienta con los baches de nuestras calles, pero el ajuste y la insonorización son impecables. Por su parte, la dirección es precisa, aunque no resulta tan comunicativa con el conductor como nos gustaría, pero cumple a cabalidad su labor.
Por $132.390.000, la oferta del Renault Zoe nos parece conveniente en Colombia y con ello debe enfrentar a modelos como BYD e3 HB, JAC e2 y Nissan Leaf; en ese contexto, Renault hace una oferta muy atractiva. Para animar al usuario, digamos que con la autonomía que ofrece ahora el EV francés, se puede viajar desde Bogotá hasta Bucaramanga con una sola carga, con el plus de tener el corazón feliz por no contaminar el planeta.