Fue a principios de 2012 cuando Renault-Sofasa presentó con orgullo en su planta de Envigado a la Duster, modelo que en su introducción se posicionó bajo la premisa del “4x4 para todos”. Al mirar en retrospectiva se puede decir que resultó más que ganadora la apuesta que en su momento hizo la marca, al ofrecer un SUV orientado a las necesidades de mercados como el nuestro.
Los registros de la Renault Duster son realmente sorprendentes, si consideramos que desde su introducción se han comercializado más de un millón de unidades en 64 países y cerca de 550.000 corresponden a Latinoamérica; en el caso colombiano, ya son más de 90.000 unidades Duster rodando en nuestras vías.
Cuando se presentó formalmente en el país la nueva Duster, hace algunas semanas, también se confirmó que dicha camioneta se seguirá ensamblando en la planta colombiana, lo que reafirma de nuevo la confianza del fabricante en un vehículo que ha sido protagonista de primer nivel en el auge de los SUV en territorio nacional durante los últimos años.
Si bien el más reciente cambio de la Duster no corresponde a una nueva generación, se debe remarcar que hay muchas novedades para este modelo, que resulta vital para los intereses regionales de la marca. En esta ocasión tuvimos oportunidad de probar la versión tope de gama, que corresponde al modelo Intens 4x4 Outsider, no solo el de mayor precio ($82.900.000), sino el que ofrece la imagen más aventurera.
Renault Duster Intens Outsider: diseño
En el artículo de lanzamiento de este modelo para Colombia adelantamos los principales aspectos que sobresalen en esta camioneta, como el hecho de conservar esa imagen robusta y un tanto salvaje con la que remarca su condición off road, la cual es mucho más palpable en la versión Intens Outsider, que se caracteriza por incluir un kit “aventurero”, que adiciona add on (defensa sobrepuesta al parachoques) con luces, ensanchadores laterales, protectores de puerta y barras negras de techo.
Todo esto se complementa con unos vistosos rines de aluminio de 17 pulgadas diamantados (son de 16” en el resto de versiones), con lo que se tiene un conjunto que pide a gritos el escarpado; ciertamente, por sus muy favorables ángulos dinámicos (31° de ataque y 33° de salida), además de una distancia de despeje al suelo de 25 centímetros, la Duster no se amilana ante los desafíos que pueda enfrentar fuera del pavimento.
Otro aspecto que contribuye a la percepción de robustez de la Renault Duster es que la línea de cintura es más alta con respecto al modelo que releva; ello obligó al rediseño de puertas y de los paneles laterales. En la parte posterior, la renovación incluyó la compuerta del baúl, que, por cierto, exige tener cuidado al abrir en parqueaderos muy bajitos, porque se eleva hasta los 2,02 metros. El detalle característico en esta área es la nueva firma luminosa LED de las luces traseras.
Renault Duster Intens Outsider: interior y equipamiento
Tan pronto se aborda la camioneta se percibe un escalamiento en calidad y comodidad; la ergonomía es muy favorable, pues se advierte mejor ubicación de los controles, ello hace que la posición de manejo resulte muy buena y se favorezca por el timón regulable en altura y profundidad, así mismo, el asiento del conductor también se pueda graduar en altura.
Si bien por su diseño el área del vidrio posterior es más bien reducida, acertadamente se usan apoyacabezas traseros regulables en altura para no comprometer la visibilidad posterior. Dos detalles a considerar, el primero es que no existe la opción de regular la altura de los cinturones de seguridad delanteros; además, considerando su vocación más off road, el tapizado de los asientos de esta versión debería tener más área en TEP (cuero sintético), porque tanta tela expuesta no favorece la limpieza del interior luego de una excursión en el destapado.
La Duster conserva su gran fortaleza para acomodar sin problema a cinco ocupantes; particularmente, los pasajeros traseros disponen de buen espacio a lo ancho (1,41 metros) y lo alto, con 90 centímetros libres desde la silla al techo. En todo caso, las buenas cotas de comodidad comprometen un poco la posibilidad de carga en el baúl, que para esta versión es de 400 litros (es de 475 litros en las versiones 4x2); consideremos, por ejemplo, que su hermano, el sedán Logan, ofrece 510 litros de capacidad.
Los plásticos de la consola y las puertas son de tacto duro, pero su calidad es aceptable y lucen bien; se destacan los insertos en imitación aluminio que decoran las renovadas salidas del aire acondicionado (por cierto, su gestión nos parece bastante ruidosa), las manijas, los brazos del volante, los controles de la climatización y el pomo de la palanca de cambios.
En cuanto al equipamiento, sabemos que Renault se caracteriza por ofrecer una buena relación valor/precio en este rubro, por lo que la Duster 2021 no es la excepción. Hay muchos recursos para desplazarse con comodidad, como el A/A digital, una oferta de 20,3 litros de espacios en el habitáculo para acomodar objetos y nuevo sistema de audio con cuatro parlantes integrados al panel de la puerta y dos tweeters.
En conectividad, se destacan el nuevo centro multimedia Easy Link con pantalla de 8” y una interfaz que realmente resulta muy intuitiva y sencilla de manejar; aparte de conexión Bluetooth (con opción de emparejar hasta seis usuarios), el sistema ofrece la posibilidad de duplicar la imagen del celular a través de Android Auto y Apple CarPlay. Además, se pueden realizar dos llamadas de manera simultánea a través del sistema.
Otro gadget exclusivo para las versiones off- road es el monitor 4x4, que integra funciones muy útiles en el escarpado, gracias a una cámara 360° que permite monitorear el ángulo de inclinación, el ángulo de paso (para apreciar la inclinación de pendientes y ascensos) y la brújula. Una precisión con este recurso es que no cuenta con perspectiva cenital, sino que toca seleccionar alguna de las cuatro vistas posibles: frontal, posterior o cada uno de los costados.
Renault Duster Intens Outsider: seguridad y mecánica
Hay importantes novedades en materia de seguridad; por ejemplo, este modelo recibió refuerzos estructurales y ello supone un aumento del 12,5% en la rigidez torsional, con respecto al modelo anterior; así mismo, ahora también incluye cinturón trasero central de tres puntos y cinturones delanteros con pretensores.
Además, incorpora recursos como control de estabilidad, frenos ABS con Ayuda de Frenado de Emergencia, así como Asistente de Arranque en Pendiente (HSA) y Asistente de Control en Descenso (HDC). Algo que sí debería revaluar Renault-Sofasa con la Duster es que, incluso en la versión tope de gama, solo hay disponibles dos airbags, un hecho incompresible si se considera que sus hermanos de menor gama, como Kwid o Logan, ofrecen hasta cuatro bolsas de aire.
Con respecto a la motorización estrella, el nuevo motor turbo de 1,3 litros TCe (por Turbo Control Efficiency), tenemos un propulsor desarrollado en alianza con Daimler; ello significa que este compacto pero brioso propulsor también anima modelos premium.
La marca destaca detalles técnicos muy particulares en este bloque turbocargado de cuatro cilindros en línea y 16 válvulas, como el hecho de incluir una válvula de seguridad con actuador eléctrico (e-waste gate), que proporciona un control más preciso y respuestas más rápidas, especialmente a bajas velocidades de régimen.
Otra minucia técnica de este motor es el Bore Spray Coating (BSC), una innovación que reemplaza las tradicionales camisas de cilindros por un revestimiento delgado de baja fricción hecho de acero de alta resistencia, con lo que se mejora la estabilidad de la combustión y se reduce efectivamente la fricción entre el pistón y el cilindro.
Renault Duster Intens Outsider: desempeño
Realmente, el cambio del motor 2,0 litros por la nueva unidad turbo de 1.3 litros es radical y muy favorable. Desde las escuetas cifras tenemos ahora en la versión tope de gama una favorable relación peso/potencia de 9,24 kilos por cada caballo. En la práctica, es grato tener una camioneta que, pese a su volumen, resulta muy reactiva con apenas presionar el pedal del acelerador. Recordemos que esta unidad entrega 154 caballos de potencia y 270 Nm de torque.
El turbolag es mínimo y por ello a cada momento sientes que los caballos de potencia están prestos a salir, en la medida que los demandes sin restricción con el acelerador; así mismo, la caja manual de seis velocidades con la que se gestiona esta versión ofrece buena respuesta para progresar las marchas. El buen tacto de la dirección y un acertado reglaje de la suspensión favorecen la sensación de marcha.
El motor, que se puede alimentar sin problemas con gasolina corriente, deja que la aguja del tacómetro progrese hasta las seis mil vueltas si lo exiges (eso sí, luego no te quejes del consumo, a nosotros nos dejó un registro promedio de 36,4 kilómetros por galón), pero hay una abrupta caída de potencia con el corte de inyección.
Entre las 2.000 y las 3.500 rpm es donde más cómodo y mejor provecho se le puede sacar al motor; realmente resulta muy competente para los sobrepasos y subir pendientes con propiedad. Puede que las aceleraciones no sean las de un deportivo (no olvides que estamos a bordo de un familiar), pero son contundentes y ello hace agradable su manejo.
Por su parte, el selector giratorio de tracción resulta muy práctico y funcional. Si no te quieres complicar la vida, se puede dejar en modo automático y así el sistema distribuye y optimiza la potencia entre las cuatro ruedas, según las condiciones del terreno. Si el usuario es más purista, puede optar por el 2WD para la conducción urbana, donde la potencia se direccionará exclusivamente a las llantas delanteras; al llevarlo al modo de bloqueo (Lock), entonces el sistema distribuye la potencia en forma constante, 50% al eje delantero y 50% al trasero.
En síntesis, la actualización le da un merecido y acertado segundo aire a la Duster, que, particularmente con esta nueva motorización, optimiza la buena relación precio/espacio, que tan buenos réditos le han valido en su segmento, a lo que añade ahora un desempeño más que destacado.