Toyota y Subaru tienen una muy buena relación que les ha permitido trabajar en conjunto en diversos proyectos, teniendo como mejor ejemplo la creación de los GT86/BRZ, pero eso no es todo, ya que además de confirmar que ya trabajan en la segunda generación de sus deportivos compactos, ambas compañías extenderán su colaboración para crear una plataforma exprofesa para vehículos eléctricos.
Esta nueva plataforma de carácter modular será usada en modelos de tamaño compacto y mediano, con diferentes carrocerías, y eso, por supuesto una SUV que se venderá por ambas marcas y cuya llegada está pactada para la próxima década. Desde ahora advertimos, que los ojos están puestos en China y Estados Unidos.
Cada fabricante aportará en las áreas de conocimiento donde son más fuertes. Esto quiere decir que Toyota aportará todo su expertise en materia de electrificación, mientas que Subaru contribuirá con la gran experiencia en sistemas de tracción total. Al combinar sus fuerzas las dos compañías "tienen la intención de asumir el desafío de crear productos atractivos con el atractivo que solo los crossovers eléctricos pueden ofrecer".
Por el momento, Toyota tiene una fuerte alineación en cuanto híbridos convencionales e híbridos plug-in se refiere, pero en cuánto a 100% eléctricos, sólo dispone del C-HR EV/ Izoa EV. Por su parte Subaru está muy por detrás en la materia ya que más allá del Crosstrek PHEV (un híbrido enchufable con tecnología Toyota) no cuenta con ningún desarrollo propio.