
Durante muchos años, Tesla se posicionó como la marca más sólida del segmento de autos eléctricos a nivel global y referente en tecnología, modelo de negocio y deseo de la clientela. La competencia hacía todo lo posible por, al menos, intentar captar una parte del mercado donde reinaba el imperio de Elon Musk; sin embargo, las cosas comenzaron a cambiar desde hace poco y, según un estudio publicado por UBS, la popularidad de Tesla viene cayendo en picada y sus rivales capitalizan esta situación.
El porcentaje de su caída varía bastante según la región y país, pero a nivel global se nota que el interés de las personas que consideraban a Tesla como su principal referente para comprar un auto eléctrico nuevo cayó del 23% en 2022 a 18% en 2024.
Por su parte, de acuerdo con Jato Dynamics, empresa especializada en datos, análisis e inteligencia del mercado automotor, Tesla reportó en abril una caída interanual del 49%. En contraste, BYD experimentó un aumento del 359% durante el mismo período, gracias a su amplia y competitiva gama de vehículos totalmente eléctricos e híbridos enchufables. La rápida expansión de BYD la sitúa por delante de las marcas europeas consolidadas.
Hacer corriente del eléctrico caído
China es el mercado en el que la marca norteamericana sufre más, especialmente porque ahi eran reyes. En 2020, el 30% de los posibles compradores del dragón asiático ubicaban a Tesla como primera opción, en 2023, la cifra cayó a 18% y en 2024 bajaron a 14%.
Ahora, la mayoría de posibles compradores en China prefieren comprar autos de marcas locales con BYD y Geely, que lideran cómodamente las ventas; sin embargo, ese fenómeno también se está reflejando en Europa.
Durante abril, en el Viejo Continente, BYD destronó a Tesla como la marca que más autos eléctricos vendió. El coloso chino aumentó su participación en un 169%, mientras que Tesla cayó un 49%. En todo caso, no solo los fabricantes chinos están aprovechando esta situación, marcas como BMW, Volkswagen, Hyundai y, en algunos casos, Ford, empezaron a tener mayor preferencia por parte de los posibles clientes.
El desplome de la popularidad de Tesla tiene varias causas:
- La competencia mejoró considerablemente sus productos
- Los modelos que ofrece Tesla comienzan a lucir viejos y solo reciben actualizaciones
Finalmente, está su propio dueño, Elon Musk, cuyas decisiones políticas y su desempeño en el gobierno de Trump lo convirtieron en un "anti-embajador" de marca, haciendo que millones de posibles compradores se alejen de sus vehículos, pese a los desesperados intentos por retenerlos.