La Asociación Gremial de Concesionarios de Automotores (Aconauto) informa que Colombia tiene uno de los índices de motorización más bajos del continente, el cual es de apenas 3,6 vehículos por cada 1.000 habitantes; de acuerdo con las cifras, nuestro país se ubicó el año pasado en el penúltimo lugar de la tabla, apenas supera a Venezuela.
“A esta conclusión llegamos gracias al más reciente informe sobre el mercado regional que presentó la Asociación Latinoamericana de Distribuidores de Automotores (Aladda), a la cual Aconauto acaba de ser aceptada como miembro”, señala Pedro Nel Quijano, presidente ejecutivo de Aconauto.
El índice de motorización en Colombia es alarmantemente bajo si consideramos, además, que nuestro país tiene un PIB per cápita superior al de otras naciones vecinas (como Paraguay, Bolivia y Ecuador), pero en todo caso nuestra relación entre habitantes y la venta de vehículos particulares nuevos es inferior, lo que permite inferir que el tema no necesariamente tiene que ver sólo con el poder adquisitivo.
El déficit de automotores en Colombia se suma a otros indicadores preocupantes, como el rezago en la infraestructura vial y la obsolescencia del parque automotor, lo que impacta directamente en la falta de competitividad del país. Ante ese panorama, que se sustenta en las bajas cifras de ventas que mantiene el mercado nacional desde hace año y medio, el gremio sostiene que es necesaria la reactivación del sector con acciones concretas y mensajes desde el Ejecutivo que reafirmen la confianza del inversionista y del consumidor.
Teniendo en cuenta el llamado del ministro de Hacienda a los gremios para conformar una mesa de trabajo que procure la reactivación del sector automotor colombiano, Aconauto y sus concesionarios afiliados se ponen a disposición en vista de su importancia en la generación de impuestos para el recaudo nacional y de empleo para el bienestar del país.
Vale recordar que Aconauto tiene como misión representar los intereses de los concesionarios de vehículos en Colombia, velando por un desarrollo del sector, regulado por una legislación que promueva el progreso, con responsabilidad social y ambiental.
A su parte, desde 1974, Aladda busca escenarios de discusión y acción en favor del comercio automotor de toda Latinoamérica. El objetivo es que sus asociados, las asociaciones nacionales de distribuidores, participen en estos espacios de integración, para intercambiar experiencias y abogar por un mejor desempeño del sector de la distribución de automotores.
