La tendencia actual de la industria es instalar pantallas cada vez más grandes en el tablero de los autos o, mejor, convertir este espacio en una sola megapantalla.
Mercedes-Benz lidera esta corriente con las 56 pulgadas de su “Hyperscreen”, pero casi todas las automotrices aportan en este afán por maximizar los inmensos monitores, bien sea en formato vertical o en alargadas pantallas que atraviesan el ancho de la cabina.
Hyperscreen de Mercedes-Benz
Alfa Romeo apuesta a la conducción
Ante el panorama “cinematrográfico” de los nuevos autos, Alfa Romeo parece nadar a contracorriente y dice que sus clientes así lo prefieren. La razón suena lógica y está en la esencia misma del tipo de experiencia de uso que busca quien compra un auto de la marca italiana: conducir.
En una entrevista reciente, Jean-Philippe Imparato, cabeza de Alfa Romeo, comentó que el típico usuario de la marca no está interesado en mil funcionalidades digitales, simplemente quiere manejar el auto.
Actualmente, los modelos del “Biscione” ofrecen pantallas multimedia de entre 9" y 11” (en números redondos) y de 12,3 pulgadas para los cuadros de instrumentos. Se espera que en el futuro ninguna de ellas sobrepase las 13”, dimensiones contenidas para lo que hacen las marcas premium (y otras no tanto) actualmente.
A cambio de ofrecer megapantallas, Alfa Romeo promete mantener elementos tradicionales, como el llamado cannocchiale (telescopio) con instrumentos redondos profundos y doble visera, que se complementarían con una pantalla.
La gran diferencia de los italianos es el empleo de un Head Up Display grande, el cual pondría mucha información frente al conductor en formato de realidad aumentada.