Algunos segmentos del sector automotor nacional, como Híbridos y Eléctricos (H y E), muestran una dinámica más que interesante en el último año, pese a las dificultades impuestas por la pandemia y, en las últimas semanas, por la afectación a todo el aparato productivo que generaron los bloqueos y las protestas sociales.
De acuerdo con las cifras recopiladas por la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), en el acumulado hasta mayo, se matricularon ante el Registro Único Nacional de Tránsito (Runt) un total de 4.734 unidades H y E, lo que supone un crecimiento del 238%, frente a las 1.398 matrículas que se reportaron en el mismo periodo de 2020.
Es un hecho que la tendencia del mercado está cada vez más orientada a la movilidad sostenible, gracias al trabajo articulado entre las autoridades y las empresas del sector que ofrecen cada vez más y novedosas alternativas, como es el caso de BYD, que al cierre de mayo de este año reportó un crecimiento en ventas del 17,3% y una participación de mercado de 57,1% con respecto al mismo mes de 2020, en el segmento de vehículos eléctricos (EV).
Beneficios electrizantes
Precisamente, de la mano de BYD repasamos las principales ventajas que tienen los compradores en Colombia que optan por un vehículo eléctrico:
- Ahorro significativo en su operación: considerando los beneficios tributarios asociados al impuesto sobre la renta (que pueden llegar a ser hasta del 50% del valor del vehículo), el impuesto anual del 1% del valor comercial del vehículo; 10% de descuento en el SOAT y la disminución en costos de mantenimiento en un 75%, debido a que los EV, en el caso de los BYD, ingresan a servicio cada 12.000 km, con tarifas muy bajas, comparadas con un vehículo de combustión de similares características. Además, también está el ahorro de casi 60% por el consumo del combustible.
- Recuperación del costo total de propiedad en menos de tres años: este importante indicador significa que se recupera la diferencia en inversión (entre 30% a 40%) comprando el vehículo eléctrico, teniendo en cuenta solamente lo que se ahorra en mantenimiento en tres años.
- Sin restricciones de circulación: los vehículos eléctricos están exentos en las principales ciudades de medidas como Pico y Placa, Día sin carro y de restricciones por medidas ambientales.
- Parqueaderos amigables: recordemos que los edificios del sector público y comerciales que tengan parqueaderos deberán destinar 2% de sus cupos de parqueo para el uso preferencial de vehículos eléctricos.
- Autonomía: un vehículo eléctrico con autonomía de 300 km, por ejemplo, su carga completa puede durar aproximadamente 10 días con recorridos promedio día de 30 km a 40 km en una ciudad como Bogotá. La recarga se puede realizar en el punto instalado en la casa, en alguno de los talleres de posventa de Motorysa (si el vehículo es BYD) o en alguna de las estaciones de carga que hay en la ciudad.
- Es importante considerar que el consumo de la batería depende de factores diversos que impactan directamente el gasto y la autonomía, como condiciones de manejo, topografía, terrenos, velocidad de conducción, peso y estado de las llantas (Ciclo NEDC).
- Amplia garantía de las baterías: en el caso de BYD, ofrece para su operación en Colombia una garantía completa de 500.000 kilómetros en sus baterías u 8 años, lo primero que se cumpla.
- Contribución al cuidado del medio ambiente: el gran aporte de los EV es que generan cero emisiones de gases contaminantes y cero emisiones de ruido, por lo que además favorecen el bienestar de los ocupantes. Adicionalmente, en el caso de BYD, la marca recibe las baterías de los vehículos de los clientes después de su ciclo de vida normal, las cuales harán parte de planes del importador Motorysa y de la casa matriz, para participar en proyectos de segundos usos en sectores residenciales e industriales.