A pesar que Bosch se encuentra trabajando en el desarrollo de una gama de sistemas de propulsión eficientes, desde motores de combustión y modelos eléctricos de batería hasta pilas de combustible, la empresa alemana menciona que los motores de diésel previsiblemente seguirán siendo la opción preferida en el futuro.
Ningún otro motor de combustión se utiliza de tantas formas. Sus ventajas incluyen una alta eficiencia y los beneficios económicos asociados, así como un fuerte rendimiento del motor.
Nada como el diésel
Ante esta situación, la cartera de productos diésel de Bosch incluye componentes para la inyección y el suministro de combustible, la gestión del aire y del motor y el tratamiento de los gases de escape. De igual manera, también los ha aprobado para el uso de combustibles sintéticos.
En este sentido, Bosch ha indicado que, entre otras acciones, su tratamiento de gases de escape mediante inyección de urea ayuda a reducir las emisiones de los vehículos.
Denominado reducción catalítica selectiva o SCR, este sistema con doble inyección ayuda a reducir aún más las emisiones de los vehículos diésel y hacerlos más económicos en el uso de recursos.
Esto demuestra que Bosch está mejorando sistemáticamente sus sistemas de propulsión diésel para el uso dentro y fuera de la carretera.
En este mismo sentido, Bosch y el fabricante chino de motores Weichai Power fueron los primeros en aumentar la eficiencia de un motor diésel de vehículos comerciales hasta en un 50 por ciento, un verdadero hito, dado que el valor máximo para camiones hasta la fecha era del 46 por ciento.
Bosch espera desempeñar un papel en la realización de un transporte climáticamente neutral para todas las clases de vehículos. Con este fin, la empresa está desarrollando una gama de sistemas de propulsión eficientes, desde motores de combustión y modelos eléctricos de batería hasta pilas de combustible.