Durante los últimos años la Fórmula 1 ha buscado la forma de tener carreras más emocionantes, con más rebases y más luchas en la pista. Uno de estos esfuerzos tiene que ver con las llantas que Pirelli desarrolla para cada temporada, que van reduciendo gradualmente la dureza de la superficie, para generar distintas estrategias en la carrera.
Tristemente, salvo algunas ocasiones en las que hay una estrategia desesperada por algún piloto puntero que parte muy atrás, en general, las estrategias de los equipos son calcadas y no existen grandes emociones, a excepción de alguno que otro Gran Premio, como este año en Bahrein.
Así que, con seis compuestos distintos en la temporada (de los que se tienen que usar de forma obligatoria dos en carrera), algunos medios europeos comienzan a especular que el siguiente paso del fabricante de llantas será mezclarlos para poder distanciar mejor el rendimiento de cada uno.
Hasta ahora, para cada fecha de la temporada, la firma italiana decide cuáles serán los tres compuestos (de seis disponibles) de llantas que se llevarán y la elección es consecutiva; es decir, se elige el C1, C2 y C3, siendo el C1 el más duro y el C3 el más suave, con un promedio de diferencia de tiempo de vuelta de un segundo entre ellos.
Con este cambio (que tendría que se aprobado por el Consejo del Automovilismo de la FIA) lo que se podría hacer es tener un C2, C4 y C6, como las opciones para el fin de semana, dando una mayor margen en la durabilidad de los compuestos y sus diferencias de desempeño dinámico, con lo que se busca que haya otro tipo de estrategias donde los equipos tengan que arriesgar un poco más.
A pesar de estos esfuerzos, si es que se llegan a aprobarnla propuesta, la realidad es que pasará lo mismo: la mayoría de escuderías utilizarán estrategias muy parecidas, buscando undercuts (estrategia de carrera donde un piloto entra a boxes para cambiar llaantes antes que el piloto que tiene delante) y eliminando el compuesto más suave en prácticamente todos los Grandes Premios.
