China continúa creciendo en el sector de los vehículos eléctricos (EV); al aprovechar un nicho que otras marcas de diferentes regiones ignoraron, ha logrado sacar ventaja y ahora dificulta la competencia para sus rivales.
Esto es evidente con los informes que indican que las marcas chinas acaparan hasta el 76% de las ventas globales de los autos de nuevas energías (eléctricos + híbridos enchufables).
El secreto de este dominio es el alcance que tienen las marcas chinas, pues decidieron atacar en todos los países a los que puedan llegar y en donde la infraestructura para carga sea lo mínimo necesario para tener éxito.
Esta impresionante cifra del 76% es aún más notable considerando que las marcas chinas no han ingresado al mercado de Estados Unidos, el segundo más grande del mundo en el sector automotor.
La información la suministra la consultora Rho Motion, que indica que los EV y PHEV chinos ya comienzan a tomar gran relevancia en Europa, al abarcar el 4% del mercado en Alemania, el 5% en Francia, el 6% en Países Bajos y hasta el 10% en España.
Sin embargo, han tenido mayor éxito en países sin una industria automotriz local sólida; es decir, sin marcas nacionales predominantes, y en economías menos desarrolladas.
Considerando lo anterior, destaca que en India poseen el 23% del mercado, en México hasta el 70%, y en Brasil una cifra impresionante del 82% del mercado local.
Al sumar lo anterior, más el claro dominio que tienen en su país de origen, que es el más fuerte del mundo, es cómo han logrado superar a cualquier otra región en el dominio de ventas de autos eléctricos. Este dominio se debe principalmente a su enfoque en el desarrollo de baterías, pero también gracias a los enormes subsidios que el propio gobierno chino ha otorgado a las marcas nacionales para expandirse tan rápido como puedan.
