Vende tu carro
Industria

Renault-Sofasa celebra 55 años de fructífera presencia en Colombia

La ensambladora hace un llamado para promover la industria automotriz nacional, haciéndola más competitiva y atractiva para la inversión.

Renault-Sofasa celebra 55 años de fructífera presencia en Colombia

El 2 de julio de 1969 se constituyó oficialmente la Sociedad de Automotores Sofasa-Renault y un año después comenzó la producción local del R4, uno de los carros más icónicos de todos los tiempos y el punto partida de una historia exitosa en Colombia. Es por ello que la marca celebra 55 años de presencia local, a lo largo de los cuales impulsa la capacidad productiva y la generación de empleos dignos en el país.

Durante más de cinco décadas, Renault-Sofasa le ha entregado al país diferentes soluciones de movilidad a través de los modelos más emblemáticos y que permanecen en el corazón de los usuarios. En la actualidad, Renault-Sofasa es un grupo empresarial que lo integran cinco filiales de Renault Group en Colombia: Renault-Sofasa, Mobilize Financial Services, Renault Plan Rombo, Renault Renting y su Fundación Renault, que este año cumple 10 años en el país.

Quien compra Renault puede sentirse verdaderamente orgulloso porque no solo adquiere un vehículo ensamblado en su propio país, sino que también contribuye a impulsar la economía nacional y a generar 7.000 empleos dignos y de calidad en nuestra cadena de valor”, señala Ariel Montenegro, Presidente Director General de Renault-Sofasa.

Importancia de la industria automotriz

Las cifras avalan el buen saldo que acumula Renault-Sofasa, la única ensambladora de vehículos livianos que queda en el país, tras la decisión de General Motros de dejar de ensamblar vehículos en su planta local (GM-Colmotores) y en la de Ecuador.

  • Durante 55 años, Renault-Sofasa ha producido 17 modelos y ensamblado 1,7 millones de vehículos.
  • El año pasado, la industria automotriz representó el 7% del PIB industrial y Renault-Sofasa aportó el 70% del ensamble nacional.
  • Según estadísticas del Ministerio de Hacienda, cada peso que se invierte en la fabricación de un vehículo genera 2,6 pesos en la producción total de la economía.
  • Por cada 1.000 millones de pesos destinados a la producción de automotores se generan 18 empleos adicionales.
  • El proceso productivo de Renault-Sofasa genera un efecto multiplicador en las regiones, pues sus 34 proveedores de autopartes están distribuidos en cinco departamentos.
  • Pese a que la industria nacional se debilitó durante la última década, las exportaciones de Renault-Sofasa crecieron 11% en el mercado latinoamericano.

Para asegurar su permanencia en el país, Renault-Sofasa se ha dedicado a fortalecer su cadena de valor en términos de tecnología, automatización y talento humano. Así mismo, implementa prácticas sostenibles y trabaja en la expansión hacia nuevos mercados. Es por ello que la planta de Envigado sigue ofreciendo oportunidades para el ensamble local y el desarrollo de la industria; sin embargo, dicho esfuerzo requiere más apoyo para seguir demostrando su competitividad, frente a los demás productores de Latinoamérica.

Aspectos clave que debe considerar la industria

Así lucían las instalaciones de Renault-Sofasa en sus primeros años.

Para mantener una industria automotriz fuerte se requiere fortalecerla en todos los frentes, por ende la ensambladora quiere seguir liderando en términos de innovación tecnológica y en buenas prácticas empresariales. A propósito de su cumpleaños 55, Renault -Sofasa quiere resaltar los tres aspectos que considera clave para promover el crecimiento y la protección de la industria automotriz colombiana.

Infraestructura y conectividad

Actualmente, la principal necesidad de la industria automotriz colombiana es aumentar la competitividad de sus exportaciones, así como disponer de la infraestructura necesaria para acercarse a los grandes mercados de la región.

“En un contexto como el actual, la producción local de vehículos debe reinventarse para no depender del mercado local exclusivamente; en este sentido, replantear nuestra estrategia como ensambladoras para atraer proyectos de inversión con vocación de producción y exportación de vehículos es vital. Es una prioridad del país la implementación de mecanismos que otorguen competitividad a las exportaciones”, afirma Ariel Montenegro.

Convertirse en un hub de exportación competitiva para Latinoamérica es el único camino viable que tiene la industria automotriz local para garantizar su sostenibilidad futura. Justo por ello, Renault-Sofasa le apuesta a la industrialización del nuevo carro colombiano para el 2025: Renault Kwid, vehículo que tendrá especial énfasis en la exportación, pues llegará a más de 15 países de la región.

Promoción del mercado interno

El país necesita con urgencia la renovación de su parque automotor. El envejecimiento de los vehículos es una de las más importantes fuentes de emisiones contaminantes (la edad promedio de los automotores en Colombia es de 19 años, aparte que ocupamos el penúltimo lugar en el índice de motorización de la región) y resolverlo sería la forma más práctica de acelerar la descarbonización del transporte, a la vez que se reactivaría el mercado automotor local y fortalecería la reindustrialización.

Si bien los vehículos híbridos y eléctricos hacen su aporte, este no resulta suficiente. En la actualidad, la industria colombiana ofrece vehículos térmicos lo suficientemente eficientes para demostrar su compromiso medioambiental; por ejemplo, un Renault último modelo del segmento A puede reducir en 80% las partículas contaminantes en comparación con un vehículo homólogo de hace 15 años.

El ensamblador también destaca la importancia de proteger y fortalecer las capacidades de la mano de obra local, por lo que urge priorizar las industrias locales para incentivar el ensamble nacional. Ello implica atraer nuevas inversiones que permitan aumentar los volúmenes de producción, para que dichas empresas sigan siendo sostenibles.

Competitividad de la cadena de valor

Finalmente, Renault-Sofasa cree que es necesario que más empresas-ancla miren a Colombia como un país atractivo para invertir en esta industria, con el fin de incrementar el volumen de producción y para que la reindustrialización tenga efectos reales a corto plazo. Para ello es vital proteger la cadena de valor de la industria, comenzando por los autopartistas, con la implementación de acciones como créditos blandos, incentivos fiscales a la inversión de capital y actualización tecnológica para mejorar la competitividad exportadora y afrontar la transición energética.

“Es crucial que tomemos medidas y reaccionemos. Debemos abordar este tema de manera activa, transformando las conversaciones en acciones concretas. Nos enorgullece cumplir 55 años en el país y queremos seguir siéndolo por 55 años más”, puntualiza Ariel Montenegro.

Elkin Chávez recomienda