Global NCAP acaba de anunciar su segundo listado de resultados tras el ajuste y el endurecimiento de las pruebas de seguridad para India. Por supuesto que Suzuki, siendo uno de los actores más relevantes de dicho mercado, pasó al tablero con tres modelos de producción local, como son el Ignis, el S-Presso y el Swift.
Lamentablemente, ninguno de los tres modelos destacó en las evaluaciones, al lograr solo una estrella. Como siempre, estas pruebas se realizan tomando en cuenta los modelos más básicos disponibles en su mercado de prueba; es decir, no son exactamente los modelos que se venden en nuestro mercado, aunque, en algunos casos, si se acercan.
En este momento, en Colombia se comercializan el S-Presso y el Swift; el primero sí procede de India, pero el Swift llega de Japón y se consolida en el mercado local como el modelo más vendido: según datos de la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), al cierre de noviembre, este japonés reportó 10.340 unidades nuevas matriculadas.
En cuanto a las pruebas de Global NCAP, pese a que en el S-Presso evaluado el ESP se ofrece como opción, el estándar de seguridad debe ser mayor, pues el primer comentario realizado en el informe es que todas las estructuras del chasis y carrocería demostraron ser inestables, especialmente en choques frontales. Hay otras evaluaciones que son necesarias para subir la puntuación, pero que solo se realizan al tener ciertos dispositivos de seguridad, como los airbags de cortina para las pruebas de impacto lateral con un poste, que no se realizaron.
En el caso del Ignis y del S-Presso, no hubo recomendaciones sobre el uso de sillas para niños, considerando que ninguno de estos modelos equipan anclajes Isofix en las versiones probadas. Por lo anterior, ninguno obtuvo puntuación en la protección para niños.
Las evaluaciones
Con respecto al auto más pequeño de Suzuki, obtuvo 8,13 puntos en la evaluación de impacto frontal y 11,9 con la barrera lateral. Los daños más críticos están en la zona torácica para el conductor, con daños marginales para las piernas del conductor y el tórax del acompañante. El resto de las zonas de ambos maniquí se alternan entre bueno y adecuado. En el caso del impacto lateral las extremidades superiores reciben una evaluación marginal, mientras que la cadera y la pelvis tienen una buena evaluación.
La carrocería y la sección del cortafuegos fueron declaradas como inestables, eso significa que la rigidez estructural se ve muy comprometida.
Llama poderosamente la atención que el Swift indio (no el japonés) obtuvo 6,3 puntos en la prueba de impacto frontal, con lesiones críticas en los pies del conductor, protección débil en el tórax del conductor, evaluación marginal en los muslos de ambos ocupantes y el resto, una evaluación de adecuado a bueno. En la prueba lateral, la protección de la cabeza lo pone por encima del S-Presso, pero la evaluación para el tórax es muy débil, logrando 12,9 puntos. Todo esto es notable de señalar, considerando que el Swift es un auto de desarrollo más moderno y de mayor tamaño.
Con el Ignis ocurrió algo muy particular, la prueba de impacto lateral fue realmente crítica, con una evaluación débil para la cabeza y pobre (la más baja) para el tórax, lo que le confiere 6,91 puntos, casi la mitad de lo del Swift. En impacto frontal, sale mejor librado con 9,6 puntos, sin evaluaciones pobres, pero si con protección débil al cuerpo del conductor, marginal a los muslos y entre adecuado y bueno para las cabezas y pies.
El cortafuegos del Ignis tiene una estructura más rígida que ambos modelos mencionados, pero la carrocería si compromete la rigidez estructural.
Lo que se dijo
David Ward, presidente ejecutivo de la fundación Towards Zero dijo: "Nuevamente es decepcionante que Maruti Suzuki haya fallado en adecuarse a los progresos hechos en seguridad por sus competidores. Al menos ahora, las nuevas regulaciones en seguridad del gobierno indio forzarán a la compañía a aplicar estándares mínimos de seguridad. Sin embargo, deberían preocuparse por sus clientes y hacerlo mucho mejor aún."
Cuando Ward se refiere a sus competidores, principalmente se refiere a las marcas más que al producto: la nueva generación del Mahindra Scorpio obtuvo cinco estrellas, por ejemplo.
Es imperativo que la normativa local exija la presencia de recursos como el ESP en los autos que se comercializan en el país. En realidad, lo ideal es que no existan criterios de seguridad de primer mundo y otros para los países en vías de desarrollo, sino que se establezca un alto estándar mínimo para los autos en todos los mercados, desde el modelo más básico y que eso no solo tenga que ver con asistencias, sino que también con una mejora de las estructuras y carrocerías.