Mientras algunas personas tiene autos antiguos en perfecto estado luego de una buena restauración o una subasta, hay quienes mantienen su vehículo desde hace décadas.
Un ejemplo de esto es el caso de Kathleen Brooks, quien compró un Volkswagen Beetle rojo en diciembre de 1966 en Riverside, California. Desde entonces, el Escarabajo apodado como "Annie" ha sido el auto del día a día de la mujer que actualmente tiene 73 años.
Durante estos 51 años, el auto ha sumado más de 550.000 km, cifra que equivale a dar la vuelta al planeta tierra unas 14 veces. De hecho, hoy en día, el auto sigue siendo usado por su propietaria para llegar al trabajo.
Luego de enterarse de esta extraordinaria historia, Volkswagen decidió tomar prestado el Beetle para iniciar un proyecto especial, restaurar el vehículo en la planta donde fue construido el vehículo hace medio siglo, en Puebla, México.
A lo largo de 45 semanas, 60 técnicos de Volkswagen recrearon el vehículo para dejarlo como si hubiera salido de fábrica, además de darle algunos detalles personalizados para homenajear a su dueña.
Como parte del proceso de remodelación, el vehículo vio la reconstrucción del piso totalmente oxidado, la suspensión, la transmisión y algunos sistemas eléctricos. No podía faltar en esta remodelación el motor, que fue completamente desarmado, limpiado, actualizado y reconstruido. Y para atar el auto a la era moderna, el juego de herramientas y el gato del automóvil fueron pintados.
A lo largo de todo el proceso, el equipo reemplazó aproximadamente el 40% de las piezas y restauró 357 piezas originales. Parte fundamental de esta restauración fue la pintura roja de la carrocería y la tapicería de cuero. Igualmente, varias partes del vehículo fueron restauradas con mejores piezas que las originales, tal es el caso de los frenos de disco, el sistema de audio diseñado para imitar la apariencia de las radios originales de Beetle.