
Los autos eléctricos urbanos ya probaron ser un éxito en Europa, Japón y China. En nuestro país también comienzan a ganar cada vez más espacio, gracias a modelos como BYD Seagull, Renault Kwid E-Tech, JAC E10X o JMEV 3, entre otros. Chery tiene muy claro este tema, pues en su momento tuvieron un producto homólogo a gasolina que fue muy famoso: el QQ. Como ya lo habíamos anticipado, ahora la marca quiere replicar esa fórmula, pero justamente como un auto eléctrico, esa es la propuesta del Chery QQ Domi.
Este auto urbano es ligeramente más pequeño que su rival de BYD en 6 cms. Sus cotas llegan a los 3,72 metros de largo, por 1,70 m de ancho y 1.60 m de alto, con una distancia entre ejes de 2.520 mm. Visualmente proyecta una imagen carismática con colores vibrantes, farolas afiladas y una parrilla texturizada y con áreas de contrastes en color negro.
Equipa luces LED y rines de aleación de 14”. Como era de esperarse habrá una amplia selección de colores de carrocería que buscarán hacer que los clientes jóvenes sean los clientes principales de este auto.
Por dentro también hay muchos contrastes de color y una pantalla central de 10,25” desde la que se controlarán cada una de las funciones del auto. Frente al conductor habrá una pequeña pantalla de 7”. Contará con recursos como comandos de voz, compatibilidad con aplicaciones de celular y encendido remoto, entre otras cosas.
Mecánicamente todas las versiones llevarán un único motor bajo el capó que le dará tracción delantera y que a su vez entrega 54 hp de potencia y 110 Nm de torque. Su velocidad máxima estará limitada a 100 km/h y sus baterías pueden ser de 28,5 kWh o bien de 39,3 kWh de capacidad, con lo que puede tener autonomías de 305 km y 405 km, respectivamente, según el ciclo CLTC.
En China, sus precios inician en 59.900 yuanes, equivalentes a unos 35 millones de pesos para la versión de 28,5 kWh y de 69.900 yuanes, equivalentes a unos 41 millones para la versión de 39,3 kWh. Por el momento no hay información sobre si existirá una versión que se envíe a otros mercados para intentar competir con la conquista global que adelanta el BYD Seagull.
