
En 2023, Mazda invitó a 30 empresas y una organización voluntaria a establecer el Grupo de Trabajo y Co-creación de Hornos de Cúpulas, para investigar el desarrollo y la producción de biocombustibles a través de la adquisición estable de materias primas.
Luego de dos años de esta colaboración, el equipo de investigación y desarrollo de la firma nipona puso a prueba uno de sus hornos de fusión con cúpula de la planta de Hiroshima sustituyendo los combustibles fósiles por bloques de biomasa creados a partir de cáscara de coco.
El uso de materias primas para biocombustibles conllevaría a una reducción significativa de emisiones de carbono, pero si se tiene en cuenta que la mayoría de materias primas que usan en Japón se importan desde el extranjero, su uso enfrenta riesgos de adquisición, debido al aumento de precios y la sobreexplotación.
A través de esta prueba, Mazda Corporation corroboró el funcionamiento estable del proyecto y la valoración para que este proceso se integre al esquema de circulación de energía, el cual inicia desde la recolección de residuos de biomasa hasta la producción de combustible para la producción y el consumo local en Hiroshima y sus áreas vecinas, a través del proceso que ofrecen sus hornos de fusión.
Adicionalmente, la compañía automotriz ha estado recolectando los residuos de cáscaras de café de la cadena Tully's Coffee Shop y de 84 máquinas expendedoras de café en sus instalaciones, desde noviembre de 2024 y se confirma que esas cáscaras de café (ya usadas) se pueden carbonizar y convertir en ladrillos de biocarbón, lo que permitiría reciclar estos residuos para producir combustible.