Una de las mejores colaboraciones que dejó la Fórmula Uno fue el encuentro entre Aston Martin y Red Bull. Por supuesto, hoy ambos equipos corren por caminos separados, pero en su momento surgió la idea de darle vida a dos espectaculares hiperdeportivos que tuvieran genética de competición. El primero, lo conocemos de sobra y es el Valkyrie, exclusivo modelo para puristas que se impulsa con un V12 aspirado, pero el segundo apenas es más domesticado, el Valhalla.
Llamado así en honor al "salón de los caídos" de la mitología nórdica, donde terminan los héroes fallecidos en combate. Sin dudas, el Valhalla será un auto que te hará sentir heroico si eres capaz de dominar su potencia.
Un propulsor digno de Odín
Si bien en un inicio el Valhalla contaría con un motor V6 híbrido, en 2021 los planes cambiaron por algo más interesante. Siendo el primer Aston Martin de producción con motor central, se eligió partir por el V8 Twin Turbo de cuatro litros que impulsa al Mercedes-AMG GT Black Series y también al DBX 707, pero con importantes modificaciones:
- Cigüeñal plano
- Configuración "Hot V" (se mantiene de los motores AMG)
- Lubricación por cárter seco
- Ejes de levas y múltiples de escape rediseñados
- Turbocompresores (twin-scroll) más grandes y con rodamientos específicos
- Potente sistema de refrigeración, con radiadores específicos frontales y laterales
El motor desarrolla por sí solo 817 hp (828 CV) y 857 Nm, que se asocian a un generador eléctrico (P2.5) que se monta en la transmisión DCT de ocho velocidades, para envíar su poderío al eje trasero. Por su parte, adelante se cuenta con dos motores eléctricos más, unidos en un módulo denominado P4, para lograr el efecto de torque vectoring. Estos motores cuentan con refrigeración activa continua por aceite y son los que mueven al Valhalla en modo 100% eléctrico (por 14 kilómetros y hasta 140 km/h) o en reversa.
El sistema eléctrico completo es de 400 voltios y agrega 248 hp. Si sumamos todo, llegaremos a 1.064 caballos de potencia y 1.100 Nm de torque, los que le ayudan al Valhalla a alcanzar el 0-100 en 2,5 segundos y desarrollar una velocidad máxima estimada en 350 km/h.
¿Cómo domino esta potencia?
Varios sistemas ayudan a administrar la entrega de torque de manera eficaz. Para eso, te suministramos un diccionario específico, que te permitirá "hablar" en la lengua de los héroes:
- Sistema IVC de control dinámico integrado. Este es el que gestiona la operación integral de distintos dispositivos en conjunto; es decir, el cerebro dinámico del Valhalla.
- E-diff: diferencial LSD de accionamiento electrónico. Funciona en el eje trasero.
- Torque-Fill: usa los motores eléctricos para eliminar el letargo del turbo (turbo lag).
- E-Boost: ayuda a que el despliegue de potencia sea siempre combinado o, al menos, que el aporte eléctrico siempre supere al del motor a gasolina por sí solo.
- Loadshift: sistema de gestión de energía que evalúa cuándo sobrecargar el V8 y cuándo priorizar los motores eléctricos.
- Integrated Power Brake: sistema electrónico que permite un ajuste exacto del tacto del pedal y una sensación progresiva, sin importar si se frena suave o fuerte.
- Frenado by-wire: significa que el sistema de frenado es electrónico y no con anclajes mecánicos.
- Torque Vectoring (E-TV): es el sistema que ayuda a "meter" el auto en las curvas. Usa los motores eléctricos frontales para lograrlo y además puede regenerar energía de manera inteligente. Puede presentar distintas curvas de funcionamiento de acuerdo con el ESP.
- ESP: control de estabilidad, este ya lo conocías, pero en esta auto cuenta con tres modos: On, Off y Race.
- E-AWDD: distribución eléctrica a las cuatro ruedas, es el que gestiona el sistema AWD del Valhalla
Ahora, el Valhalla tiene cuatro modos de manejo, denominados EV, Sport, Sport+ y Race, que te simplificarán el uso de este glosario.
Por supuesto, este superdeportivo cuenta con enormes discos carbono-cerámicos de Brembo y amortiguación adaptativa DTX de Bilstein. En el frente, la suspensión utiliza un esquema de brazo de impulso (push-rod), mientras que atrás se optó por un sistema multilink.
Aerodinámica para volar como las valquirias
La carrocería del auto, que se fabrica en los talleres del equipo Aston Martin de F1, está pensada íntegramente para generar carga aerodinámica en todas sus superficies, como un F1, pero, al contrario de este, no hay que rendirle cuentas a la FIA, por lo que se puede contar con un sistema de aerodinámica activa mucho más liberal y de accionamiento hidráulico. Este consiste en un alerón delantero oculto y uno trasero plano, el cual puede funcionar como DRS, como freno aerodinámico o funcionar de manera coordinada con el alerón delantero para mantener la estabilidad del auto, sea elevándose en hasta 255 mm o ajustando su ángulo de proyección.
El alerón frontal puede ayudar tanto a la carga como a la refrigeración y también canaliza el aire hacia una zona cóncava por detrás de los splitters delanteros para generar una zona de baja presión.
Este sistema puede generar hasta 600 kilos de carga, los que son necesarios si se quiere alcanzar los 350 km/h.
Diseño
Desde las puertas de apertura diedral, hasta la toma de aire superior, el sistema de escape con dos salidas superiores (y dos salidas ocultas inferiores) y las luces 3D traseras, el Valhalla combina la belleza y elegancia de un Aston Martin con el diseño funcional de un auto de carreras ligero, lo que genera un diseño más dramático que el de sus potenciales rivales en Ferrari, McLaren y Lamborghini. Todo se fabrica en aluminio o fibra de carbono (la que puedes pintar, entintar o dejar expuesta), lo que se combina con rines de 20 y 21 pulgadas, que se pueden pedir en tres acabados, salvo que se quieran las ruedas de magnesio opcionales, que ahorran hasta 12 kilos.
Por si te lo preguntas, el Valhalla mide 4.727 mm de largo, 2.760 mm de distancia entre ejes y pesa 1.655 kilos en vacío.
Interior
Sobre la estructura de fibra de carbono moldeada por transferencia de resina en horno autoclave, cortesía del equipo Aston Martin de F1, encontramos el habitáculo. Para que lo sepas, Aston Martin no había revelado fotos del interior en ninguno de los prototipos anteriores. Es un ambiente de competición, pero fabricado con los mejores materiales y, también, con la ergonomía que uno podría esperar de un auto de carrera.
Tanto el volante como las butacas se fabrican en fibra de carbono en una sola pieza, mientras que la posición rebajada de conducción permite tener los apoyapiés en una posición más elevada. No podemos olvidar dos pantallas para el panel de instrumentos y el sistema multimedia (con Apple CarPlay), así como el equipamiento principal, que incluye freno autónomo de emergencia, control crucero adaptativo, asistente de mantenimiento de carril con aviso de salida involuntaria, luces LED con sistema Matrix e intensidad automática; además de monitor de atención al conductor y un sistema de audio Bowers & Wilkins como opción.
Comercialización
Lo que quieras en el interior o en el exterior lo puedes personalizar gracias al departamento Q by Aston Martin, sea el tipo de fibra de carbono escogida, colores, adornos, escapes de titanio, terminaciones pulidas o satinadas, combinación de tapizados en Alcántara y cuero (o una de las dos, en uno o dos colores), entre otros.
"El desarrollo del hiperauto definitivo, el Aston Martin Valkyrie, y trabajar con Adrian Newey, nos enseñó a pensar de manera diferente. Este conocimiento y una nueva metodología nos han permitido desarrollar las fortalezas de nuestros éxitos pasados y posicionar a Aston Martin como una compañía líder en su clase en tecnología, rendimiento y experiencia para nuestros clientes, que serán los poseedores de esta nueva pieza de la historia de Aston Martin, Valhalla", señaló Adrian Hallmark, CEO de Aston Martin.
Aston Martin solo fabricará 999 unidades a un precio no declarado aún.