Chery es uno de esos conglomerados automotrices que parecen avanzar a la velocidad a la luz en materia de tecnologías y productos. Las cifras avalan su progreso: ha sido la marca china líder en la exportación de vehículos de pasajeros durante 20 años consecutivos, exporta a más de 80 países y regiones, cuenta con más de 1.500 puntos comerciales y de servicio a nivel global, acumula más de 14 millones de propietarios en el mundo, ha registrado más de 14.000 patentes y tiene ocho centros de investigación y desarrollo en los que laboran cerca de 9.000 profesionales dedicados a dichas áreas.
Chery tiene grata recordación en nuestro país, pues en los albores del presente siglo fue de las primeras marcas chinas en ofrecer sus productos en el territorio nacional y dejó un legado de solidez y eficiencia; por cosas de la vida y de los negocios, justo con el inicio de la pandemia, la representación local de la marca quedó a la deriva y por ello el fabricante se tomó su tiempo para encontrar el aliado indicado que le permitiera relanzar su oferta en el país.
El designado para representar a la marca en esta nueva etapa en Colombia fue el reconocido Grupo Vardí, que desde el año pasado viene consolidando en forma juiciosa y metódica la reintroducción y presencia de Chery en el país. Precisamente, ahora el objetivo de la marca es posicionar una oferta de vehículos (con diseños modernos, mecánicas competentes y tecnología de punta) que satisfagan a plenitud las demandas de movilidad de los colombianos, pero que además resulten eficientes y amigables con el ambiente.
El actual portafolio de Chery en Colombia lo integran dos modelos de hibridación ligera (Tiggo 4 Pro MHEV y Tiggo 7 Pro MHEV), dos híbridos enchufables (Tiggo 7 Pro PHEV y Tiggo 8 Pro PHEV) y el recién presentado modelo 100% eléctrico eQ7. En esta ocasión tuvimos a prueba el Tiggo 7 Pro mild hybrid (que solo se ofrece en versión Luxury) por dos razones: 1) nos parece uno de los SUV electrificados con una de las mejores relaciones precio/calidad y también porque fue uno de los vehículos recomendados por nuestros colegas de Autocosmos Chile, en el 2022.
Chery Tiggo 7 Pro MHEV: diseño
El Tiggo 7 fue el modelo que estrenó el actual lenguaje de diseño de la marca y consideramos que tiene las proporciones justas que lo ponen a competir con grandes atributos en el segmento de los SUV medianos con hibridación ligera, frente a rivales como Mazda CX-30 y Suzuki Fronx.
El modelo del gigante de Oriente exhibe una carrocería elegante y sobria, con cierto aire deportivo, que resulta menos saturada de lo que suelen ofrecer otras marcas chinas. En el frontal, destaca la enorme parrilla con una vistosa trama que genera cierto efecto tridimensional. Hay luces automáticas LED en la parte superior y encastres profundos para acomodar las unidades antiniebla en la zona inferior.
El atractivo visual del exterior se complementa con luces traseras LED integradas transversalmente, barras de techo, rines de lujo de 18 pulgadas, alerón trasero, sun roof panorámico y deportivas salidas de escape. Sus mayores dimensiones (4.500 mm de largo, 1.842 mm de ancho y 1.705 mm de alto) le dan cierta ventaja al Tiggo 7 frente a sus rivales, en cuanto a comodidad para los cinco ocupantes, además de ser muy ergonómico para el conductor.
Chery Tiggo 7 Pro MHEV: interior y equipamiento
Con 2.670 milímetros de distancia entre ejes, el Tiggo 7 supera en 15 mm y en 150 mm a CX-30 y Fronx, respectivamente, por lo que se cuenta con un habitáculo amplio, luminoso y suficientemente cómodo en todas los puestos, incluso en la quinta plaza, pues el túnel de la transmisión apenas si sobresale en el piso y hay suficiente distancia para que las rodillas del pasajero de dicho puesto no se incomoden con la parte posterior de la consola central; por cierto, justo ahí están las salidas de aire para la zona trasera y allí también se acomodó un puerto de carga USB.
El interior del Tiggo 7 Pro tiene una muy destacada percepción de calidad, tanto en materiales como en acabados, además, mantiene la línea elegante y funcional de su hermano mayor, el Tiggo 8 Pro. El tablero se concibe por planos superpuestos, decorados con cuero y láminas que emulan el metal cepillado; una línea imaginaria se proyecta transversalmente y esta se aprovecha para disponer allí las salidas de aire, que rematan en un reborde cromado. Como resultado se obtiene un conjunto elegante y sobrio que resalta la funcionalidad.
La atención de la cabina se la roba el enorme panel flotante de 24,6”, que permite controlar de manera panorámica toda la información del vehículo; aquí se integran la pantalla central multifunción y el monitor táctil del sistema de infroentretenimiento, ambos de 12,3 pulgadas; esta última es la más grande entre sus competidores.
A diferencia del Fronx, los tapizados del Tiggo 7 Pro son en ecocuero y el diseño de las sillas es muy deportivo, con ergonómicos soportes en las plazas delanteras que favorecen la sujeción lateral y están acertadamente decorados con bordados de contraste a dos tonos. Si bien las sillas de la primera fila cuentan con reglaje eléctrico no tienen memoria, algo que sería ideal disponer por lo menos en el puesto del conductor.
La consola central es alta y en la parte baja se reserva un espacio que adorarán las mujeres, pues resulta ideal para acomodar objetos que no se deseen dejar a la vista, como una pequeña cartera; esto es aparte de la tradicional guantera que se acomoda entre las plazas delanteras. La parte superior de la consola también remata en ese bonito acabado de metal cepillado y es allí donde se ajusta el control de cambios, de tipo joystick, así como los controles del freno de parqueo electrónico, el auto hold y el cargador inalámbrico del celular, entre otros.
Muy conveniente resulta la tercera pantalla táctil de 8” con la que cuenta este modelo. Se trata de un monitor inclinado en el que se regulan todas las opciones de la climatización bizona de esta camioneta; dicho panel, que exige algo de práctica para usar en forma adecuada, integra visualmente la consola central con el tablero y colinda con una botonera que desciende del tablero principal.
Por lo demás, en la cabina del Tiggo 7 MHEV también se dispone de recursos como volante multifunción de base plana forrado en cuero (aporta otra pincelada deportiva), botón de arranque, encendido remoto del motor, luz ambiente multicolor y una muy eficiente cámara panorámica HD de 360°. El sistema de audio es Sony y cuenta con ocho parlantes, con Bluetooth y conectividad CarPlay y Android Auto, inalámbrica.
Chery Tiggo 7 Pro MHEV: motorización y seguridad
Para valorar las capacidades de los propulsores de Chery se debe anotar que el año pasado, el fabricante oriental recibió por décima vez el premio "China Heart" que se entrega a los Diez Mejores Motores, con lo que la marca consolida aún más su posición en la tecnología de trenes de potencia.
El Tiggo 7 Pro mild hybrid, así como sus hermanos Tiggo 4 y Tiggo 8, cuenta con un motor turboalimentado de la familia Acteco de cuatro cilindros y 1,5 litros, el cual genera 145 hp de potencia y 210 Nm de torque. A este esquema de tracción delantera se suma un sistema de hibridación ligera que se alimenta de una batería de litio de 48 voltios y 350 vatios-hora de capacidad; la cual acciona un generador de arranque por correa.
En este caso, la transmisión está a cargo de una caja de tipo CVT que simula nueve marchas y tiene dos modos de manejo (Eco y Sport). Frente a sus rivales de patio, el Tiggo 7 Pro tiene ocho caballos menos de potencia frente al CX-30, pero supera al modelo de Mazda por 10 Nm en cuanto a torque; en todo caso, consideremos que el modelo de Mazda se vale de un motor dos litros, lo que supone más consumo frente al 1,5 turbo de Chery. Con respecto al Fronx, el SUV de Chery lo supera en 44 hp y 74 Nm.
En el apartado de seguridad, el SUV de Chery cuenta con frenos ABS + EBD + BAS, asistentes de arranque y descenso en pendientes, control electrónico de estabilidad, sistema de monitoreo de presión de llantas, seis airbags (el Mazda adiciona el de rodilla) y anclajes Isofix, entre otros. En todo caso, hay oportunidad de mejora en la implementación de ADAS.
Chery Tiggo 7 Pro MHEV: manejo
En el modo Eco, la conducción es muy relajada y fluida, en virtud a la suave gestión de la transmisión CVT y a que el régimen de marcha privilegia la progresividad, lo que resulta ideal para el manejo urbano. En todo caso, el modo Sport hace brillar este motor turboalimentado, que entrega todo su poderío desde las 1.750 revoluciones y lo mantiene con propiedad hasta los 4.000 giros; de hecho, su buen torque favorece una marcha confiada al encarar ascensos o al realizar sobrepasos.
También destacamos el reglaje de la suspensión, independiente en ambos extremos, que se vale de un esquema McPherson adelante y multilink atrás; es muy favorable la capacidad que tiene para absorber las irregularidades del camino. Finalmente, el esquema de frenos, de disco ventilado adelante y sólido atrás, está bien asistido, pero tiene un tacto particular que exige acostumbrarse.
El sistema de hibridación ligera del Tiggo 7 no solo evita la restricción de movilidad en las ciudades donde aplica, sino que ciertamente favorece el ahorro de combustible, hasta en un 15% estimado; el tema es sobre todo perceptible en el manejo urbano congestionado, puesto que el propulsor eléctrico es el encargado de iniciar la marcha.
Tiggo 7 Pro Mild Hybrid es un buen ejemplo de que el regreso de Chery a Colombia se hace en el mejor momento, pues la marca tiene ahora una oferta con diseño fresco, tecnología innovadora y buen nivel de equipamiento, que complementa con una garantía de ocho años sin límite de kilometraje.