Hace unas semanas, las marcas japonesas Mazda, Subaru y Toyota anunciaron una alianza para mantener vivo el motor a combustión con nuevas tecnologías y combustibles. Un compromiso que implica el desarrollo de una nueva generación de trenes de potencia a combustión, que serán capaces de asociarse a apoyos eléctricos o utilizar combustibles sintéticos.
Ahora, Hiroki Nakajima, director tecnológico de Toyota, amplía en una entrevista con Automotive News los alcances del trabajo que la marca desarrolla con sus nuevos motores de combustión interna (ICE, por sus siglas en inglés) de cuatro cilindros, de 1,5 y 2,0 litros.
Hiroki Nakajima
Nakajima dice que los nuevos motores serán una solución potencialmente "revolucionaria", pues serán completamente diferentes a las mecánicas actuales, con mucho aprendizaje surgido del trabajo de la marca con los autos de hidrógeno, especialmente con el objetivo de superar el 40% de eficiencia térmica que Toyota alcanzó hace varios años.
Los nuevos bloques tendrán una carrera de pistón más corta, lo que fue "una hazaña muy difícil de lograr. Todos estos propulsores en línea serán más pequeños para revolucionar el empaque del vehículo", indica en la entrevista.
Esto permitirá bajar la parte delantera para mejorar la eficiencia al optimizar el flujo de aire. El torque que se perdió en ese proceso se compensará con la respuesta instantánea de un motor eléctrico de asistencia. Estos nuevos propulsores se desarrollaron principalmente pensando en ser híbridos.
Durante la presentación del proyecto, Nakajima anunció dos prototipos de 1,5 litros, uno de aspiración natural y otro turboalimentado. El primero reduce tanto el volumen como la altura en 10% en comparación con el actual bloque de tres cilindros. Agregar otro cilindro permitió a los ingenieros reducir la altura y hacer que el motor en general fuera más compacto.
Su tamaño compacto permite perfiles de capó más bajos, lo que reduce la resistencia aerodinámica; además, se espera una mejora en la economía de combustible en torno al 12%.
Comparación del motor actual y el futuro
La versión turbo de 1,5 litros puede cubrir el territorio del motor de aspiración natural de 2,5 litros de Toyota. Este nuevo impulsor puede reducir el volumen en 20% y la altura en 15%.
De manera similar, se espera que el motor turbo de 2,0 litros tenga un volumen y una altura 10% menores que el actual turbo de 2,4 litros.
Los primeros vehículos Toyota con los nuevos motores saldrán a la venta a partir del 2027; además, estarán en condiciones de funcionar con combustibles fósiles, con biocombustibles, con hidrógeno e incluso con e-fuels o combustibles sintéticos.