JAC presentó en el autoshow de Shanghái su nueva T9, una interesante propuesta que busca competir en un segmento de nuevo desarrollo y gran crecimiento: las pick-ups recreativas.
La marca china cuenta en la región con una amplia gama de pick-ups compuesta por la T6, la T8 y la T8 Pro, esta última disponible en Colombia. Un portafolio que ataca por precio y posicionamiento al segmento de trabajo, al ofrecer versiones austeras y de mecánica más bien sencillas, que apuntan al cliente que busca una camioneta utilitaria mediana a un precio razonable.
Aunque su uso particular también es uno de los pilares de su éxito, JAC se mantuvo relegado en cuanto a comodidad y refinamiento, en un plano muy similar a algunas de sus rivales de origen, como la Great Wall Poer o la JMC Vigus.
Precisamente eso es lo que quiere cambiar la recién develada T9, que conserva la base estructural de sus hermanas, pero añade potencia, calidad y refinamiento interior, para apuntar al atractivo segmento de las camionetas de uso recreativo.
Estas imágenes las pudimos obtener en nuestra visita a los cuarteles de JAC en Hefei, días antes de visitar el Salón de Shanghái.
La nueva JAC T9 mide 5,33 metros de largo, 1,96 metros de ancho y 1,92 metros de alto, siendo apenas un centímetro más larga que una T8 PRO, pero bastante más ancha y alta, gracias a aditamentos estéticos, como guardabarros más prominentes y barras en el techo, que ayudan a elevar la percepción de calidad.
Su frontal representa el mayor salto frente a sus hermanas, con una enorme máscara de plástico negro que le otorga un aire agresivo y que alberga a la parrilla frontal y los faros divididos en dos niveles.
La vista lateral es más convencional: equipa nuevos rines de 18 pulgadas con llantas de uso mixto y algunos apliques plásticos, diseñados para darnos sensación de mayor altura. En la parte trasera los cambios abarcan únicamente a nuevos faros, que cambian su distribución interna, así como un renovado parachoques, que, según la versión, puede ser de plástico o de metal, con un gancho de arrastre incorporado.
Las unidades expuestas en el stand de la marca en Shanghái lucían con una serie de accesorios que la hacían ver impresionante (con barra deportiva, parrilla superior, juego de luces exterior y estribos laterales) y que, de alguna manera, confirma la vocación recreacional del modelo.
Estas imágenes las pudimos obtener en nuestra visita a los cuarteles de JAC en Hefei, días antes de visitar el Salón de Shanghái.
En el interior es donde se siente un salto mucho mayor respecto de la T8, al adoptar materiales de mucha mejor factura que los existentes, como son los plásticos de inyectado blando en el tablero, insertos de ecocuero en las puertas, símil de aluminio (tanto cepillado como pulido) y la ausencia casi total de piano black.
Cuenta con tablero de instrumentos digital de 7 pulgadas y una pantalla para el infoentretenimiento de 10 pulgadas, dispuesta en formato vertical, a través de la cual se pueden ver las conexiones disponibles para telefonía e incluso una cámara de visión en 360 grados.
Estas imágenes las pudimos obtener en nuestra visita a los cuarteles de JAC en Hefei, días antes de visitar el Salón de Shanghái.
El motor 2,0 turbodiésel recibe mejoras, gracias a su nueva calibración electrónica, pasando de los 137 hp y 310 Nm actuales a 167 caballos y 410 Nm, cifras mucho más acordes con las de su competencia; el esquema se acopla únicamente a una transmisión automática de ocho relaciones y cuenta con convertidor de torque, que lo proporciona ZF.
La llegada a la región de esta pick-up (ojalá lo haga en Colombia) debería producirse antes de finalizar el año.