Uno de los grandes atractivos del Goodwood Festival of Speed es el Hillclimb, una pequeña, pero complicada pista donde toda clase de superautos se presentan con la intención de marcar el mejor tiempo posible.
En la edición de este año, la noticia estuvo a cargo de un auto eléctrico que, a pesar de no tener mayor reconocimiento, fue el más rápido en la historia de la pista de apenas 1,8 kilómetros, puesto que rompió el récord impuesto por el Volkswagen ID.R (39,90 segundos).
Al mando de Max Chilton, un expiloto de Fórmula 1 e IndyCar, el McMurtry Spéirling logró posicionarse como el auto más veloz del Hillclimb del Goodwood Festival of Speed.
Con un tiempo de 39,08 segundos, este auto no solo se consolidó como el auto eléctrico más rápido, sino también batió el récord del McLaren MP4/13 F1 que condujo Nick Heidfeld, en 1999, que registró 41,8 segundos.
McMurtry Spéirling es un pequeño y ligero auto eléctrico. Su compacta carrocería y un peso de solo mil kilógramos, se complementa con un par de motores, uno para cada rueda trasera, que generan mil caballos de potencia.
Gracias a una turbina, al estilo del Brabham BT46 o del Murray T50, es capaz de proporcionar una carga aerodinámica de dos toneladas. En virtud a su poderío, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 1,5 segundos.
McMurtry Spéirling, el auto eléctrico que rompió el récord del Goodwood Festival of Speed