Unas de cal y otras de arena en la presentación de los pilotos colombianos en la edición 89 de las 24 Horas de Le Mans, la prueba de resistencia más importante del automovilismo mundial, que se disputó este fin de semana.
Lo positivo fue que Juan Pablo Montoya y su equipo DragonSpeed Oreca Gibson #21 ganaron la carrera en la categoría LMP2 Pro Am, donde había nueve participantes; a su vez, lograron estar en el top 10 entre los LMP2 (24 en total) al cerrar en el décimo puesto y se ubicaron en el puesto 15 en la general de la carrera, entre los 61 vehículos participantes.
Infortunadamente para el Richard Mille Racing Team de la bogotana Tatiana Calderón las cosas no salieron bien, pues en el primer cuarto de carrera, iniciando la quinta hora (5:05.41s) abandonaron la prueba tras un choque que dejó muy afectado el vehículo cuando era conducido por Sophia Floersch.
En la general, el Toyota GR 010 Hybrid #7 del equipo japonés Toyota Gazoo, conducido por Kamui Kobayashi, el argentino José María "Pechito" López y el británico Mike Conway, consiguió la victoria en Le Mans, primera en la historia de la mítica prueba para la categoría que incursionó este año.
Juan Pablo Montoya y sus compañeros Henrik Hedman y Ben Hanley tuvieron una buena carrera, en donde fueron de menos a más: clasificaron en el puesto 13, pero en las prácticas previas tuvieron un duro accidente cuando conducía el colombiano, debido a una falla en la suspensión que los envió contra el muro y debieron trabajar en recuperar el carro para la competencia.
La partida no fue fácil, pues se dio bajo la lluvia y con el safety car por temas de seguridad hasta que la pista secó un poco.
Superando las dificultades, especialmente las del manejo del tráfico y pista mojada, los tres pilotos lograron ascender en posiciones tanto en la general de los LMP2 como en los de la clase Pro Am. Lograron apoderarse del primer lugar de su parcela desde la hora 18 y así cruzaron la meta.
“Fue un muy buen fin de semana, tuvimos muchos problemas durante toda la semana y en prácticas. La verdad estábamos preocupados porque cada vez que salíamos aparecía un problema nuevo, y era raro porque el carro estaba bien preparado y esto nos tenía muy estresados; me di un golpe muy duro el jueves y en el inicio de la carrera estaba muy prevenido, al final las cosas se dieron”, declaró al final Juan Pablo.