La actual situación que atraviesa el mundo, por causa de la pandemia, ha generado diversos cambios en el consumo de los diferentes sectores de la economía, particularmente en el automotor. Muestra de ello, es el caso de Motorysa, representante de vehículos eléctricos particulares BYD para Colombia, que reportó al cierre de marzo de 2021 un crecimiento en ventas del 133% y una participación de mercado de 45.6% con respecto al mismo mes de 2020 en el segmento de vehículos eléctricos. En el acumulado correspondiente a los meses de enero a marzo de vehículos matriculados por Motorysa, creció un 500,0%, con una participación en el mercado relevante del 36,6%.
El principal impulsor de este significativo avance, es el buen comportamiento del segmento de vehículos utilitarios eléctricos, que se ha visto beneficiado por las compras empresariales que han empezado a contemplar estos modelos para la movilidad corporativa.
Adriana Segura, gerente comercial de Motorysa-BYD, señala que “sin lugar a dudas, la pandemia sirvió para que personas y empresas empezáramos a tomar conciencia de los daños que estamos causando al planeta por el uso indiscriminado de combustibles fósiles; el mejoramiento en la calidad del aire de las grandes ciudades ha sido un parámetro importante para que empecemos a pensar en el uso de vehículos eléctricos en las operaciones de varias empresas”.
Actualmente, modelos utilitarios como la SUV Yuan EV BYD o del hatchback e2 EV BYD se han convertido en grandes opciones para la conformación de las flotas de carros de las empresas, no solo por la contribución que se hace al cuidado del medio ambiente, sino por todos los ahorros que estas traen a la operación, como disminución en el consumo de combustible, hasta en un 60%; beneficios tributarios en impuesto sobre la renta que pueden llegar a ser hasta del 50% del valor de los vehículos; impuestos anuales del 1% del valor comercial del vehículo; descuento en el SOAT del 10%; y disminución en costos de mantenimiento debido a que los vehículos eléctricos BYD ingresan a servicio cada 12.000 km con precios muy bajos en comparación con un vehículo a combustión de las mismas características.