La firma bávara BMW inauguró de manera oficial su nueva fábrica de producción de automóviles situada en San Luis Potosí, México. La nueva planta, se empezó a construir desde 2014 y ahora cinco años después ya inicia operaciones. Se encargará de producir el Serie 3 de nueva generación, el cual se venderá para México, Estados Unidos y el resto del mundo.
El complejo que cuenta con áreas de carrocería, pintura y ensamble, posee una superficie de 300 hectáreas (es más grande que la de Múnich), requirió de una inversión de mil millones de dólares para su construcción y hoy emplea a 2,500 personas. Tiene una capacidad de producción de 175 mil unidades al año.
Este complejo industrial se convierte en la más reciente incorporación a la amplia red de centros de producción de BMW Group. “Será la más eficiente y sostenible, pues es la primera fábrica en la que, debido a la digitalización, en la línea de ensamble no se requerirá papel” asegura Oliver Zipse, miembro del consejo de administración de BMW AG y quien además afirma que gracias a que México cuenta con tratados de libre comercio con 45 países se podrá exportar sin problema el nuevo BMW Serie 3.
Con esta nueva planta, BMW ya cuenta con cinco fábricas de producción en el nuevo continente, pero ¿por qué se eligió México? la respuesta nos la Harald Krüger, presidente y CEO del consejo de administración de BMW Group. “La elección de este emplazamiento se basó en una compleja matriz de decisiones que había que tomar. En México contamos con una sólida red de compras y de proveedores y desde hace ya muchos años mantenemos estrechas relaciones con proveedores en América. Además, los cualificados recursos humanos a nivel local, así como la buena infraestructura técnica y social resultaron ser factores decisivos. Como ubicación”.
En la construcción de la nueva fábrica de BMW, diversas especies de animales fueron reubicadas entre ellas serpientes, tortugas, escorpiones e incluso una viuda negra. Además se cuenta con una instalación de paneles fotovoltaicos de 71,000 m2 de superficie, las cuales producirán una cuarta parte de la energía requerida para la producción en la planta y se emplearon 18,000 toneladas de acero para los principales edificios del complejo.
De las 300 hectáreas de terreno de la planta, BMW sólo empleo el 30% para la construcción de la fábrica para manufacturar el Serie 3, por lo que se cuenta con espacio sobrado para una posible expansión y con ello la producción de otros futuros modelos de la firma bávara.
