Jaguar Land Rover está investigando una nueva tecnología de automóviles conectados que le permitirá a un vehículo identificar la ubicación y gravedad de los huecos, los desagües rotos, tapas de alcantarilla faltantes en la vía y, a continuación, compartir estos datos en tiempo real a través de la nube con otros vehículos y con las autoridades de carreteras para ayudar a priorizar las reparaciones.
Si un vehículo puede recibir una advertencia de otro vehículo sobre huecos graves o alcantarillas sin tapa en la vía, los conductores serían capaces de frenar y evitar el peligro o el vehículo podría ajustar la configuración de suspensión para reducir el impacto.
Esto podría ayudar a reducir el potencial de pinchazos, llantas estalladas y otros daños del vehículo, así como accidentes de tráfico.
"Nuestro sistema de detección MagneRide equipado en el Range Rover Evoque y el Discovery Sport cuenta con sofisticados sensores que permiten al vehículo analizar el perfil de la superficie de la carretera bajo las ruedas e identificar huecos, pozos elevados y drenajes rotos. Al monitorear el movimiento del vehículo y los cambios en la altura de la suspensión, el vehículo es capaz de ajustar continuamente las características de la suspensión, dando a los pasajeros un viaje más cómodo y seguro sobre superficies irregulares y dañadas”, indicó Dr. Mike Bell, Director de Vehículo Global Conectado de Jaguar Land Rover.
Land Rover Pothole Alert Technology
