
Es un hecho el papel protagónico de las mujeres en la industria automotriz, pues cada vez tienen más relevancia no solo como propietarias y usuarias de vehículos convencionales, sino también como directivas, ingenieras, pilotos, mecánicas y hasta conductoras de vehículos pesados e industriales, que antes se creían solo podían operar los hombres.
A lo largo de los años, las mujeres han sido impulsoras del cambio en el sector del transporte, aportando de manera decisiva a una industria que progresa hacia una mayor equidad e inclusión.
El papel de las mujeres al volante se remonta a mucho antes de que la igualdad de género se convirtiera en un tema de debate. En 1888, Bertha Benz, esposa de Karl Benz, realizó el primer viaje en automóvil de la historia, recorriendo la distancia entre Mannheim y Pforzheim, en Alemania. Su hazaña la convirtió no solo en la primera mujer conductora, sino también en la primera mecánica, debido a que enfrentó y resolvió diversos desafíos durante ese trayecto, al tener que reparar el vehículo y encontrar combustible, con lo que demostró su habilidad e ingenio.
A pesar de esos antecedentes, los estereotipos en torno a las mujeres al volante siguen siendo una realidad en el presente; en todo caso, las cifras y estudios demuestran lo contrario. Uno de los mitos más comunes es que "las mujeres sufren más accidentes en la vía que los hombres"; sin embargo, en el caso local, por ejemplo, datos de la Secretaría de Movilidad de Bogotá revelan que el 80% de las infracciones de tránsito en la ciudad las cometen los hombres, lo que haría suponer que las mujeres conducen de manera más respetuosa y responsable.
Otra creencia malintencionada y popular contra la mujer recae en la frase "mujer al volante, peligro constante". Se trata de una expresión que alienta los estereotipos de género y la desigualdad, pues saber conducir no depende del género, sino de la práctica, la experiencia, el aprendizaje y la concentración; de hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que la mortalidad en los accidentes de tránsito en hombres sigue siendo casi tres veces mayor que en las mujeres.
Finalmente, se debe señalar el importante papel que desempeña la mujer en la fuerza laboral del sector del transporte en el país: según la Secretaría de Movilidad, oscila entre el 30% y el 40%. Su participación se da en todos los campos, desde operadoras de infraestructura hasta directivas en las diferentes empresas vinculadas al sector automotor.
“En Nissan, entendemos que el futuro del transporte es inclusivo, y estamos comprometidos en promover la equidad en todos los niveles de nuestra organización. Alentar a más mujeres a unirse a la industria automotriz y conducir hacia un futuro más justo es nuestra misión. Creemos que el verdadero avance solo se logra cuando todos, sin distinción de género, tienen la misma oportunidad de contribuir al progreso”, señala Edna Urrea, Sales Head de Nissan Importers Business Unit, NIBU.