Carlos Tavares, CEO de Stellantis, ha sido uno de los líderes de la industria más críticos y reacios a acatar la legislación europea que prohibirá la venta de cualquier auto que no sea 100% eléctrico a partir del 2035, pues afirma que hacer eso no es la solución.
Sin embargo, por el otro lado, Stellantis nació justo con el fin de compartir los costos y trabajos de investigación y desarrollo de modelos a baterías, entre los grupos PSA y FCA.
El portugués afirmó durante su participación en el Freedom of Mobility Forum, que las baterías de estos modelos debe ser, al menos, 50% más ligeras que las actuales, manteniendo rangos de autonomía de más de 400 kilómetros. Además, dijo que la producción de estos modelos emplean unos 500 kilos de materiales nuevos, comparándolos con un vehículo con motor de combustión interna.
“Desde un punto de vista ambiental... no creo que tenga sentido. Creo que durante la próxima década seremos capaces de minimizar el peso del paquete de baterías en un 50%, reduciendo así a la mitad el uso de materias primas adicionales, en comparación con un vehículo convencional”, según declaraciones que recogió la agencia de noticias Reuters.
También comentó que no ve al hidrógeno como una alternativa real a los carburantes o los modelos 100% eléctricos, principalmente por el alto costo que tiene, lo cual lo hace inviable para los consumidores particulares, pero sí le ve potencial para flotillas y vehículos más grandes.
Si bien en Europa, Peugeot, Citroën, Opel y Fiat tienen una importante gama de modelos totalmente eléctricos, de este lado del océano la historia ha sido más lenta, contando apenas con los anuncios de las Ram REV, Ramcharger, Ram Promaster EV y el poderoso Dodge Charger Daytona EV, que llegará a algunos mercados en los próximos meses.
Aunque el arranque de parte del exgrupo FCA fue lento, Dodge, Jeep y Ram, ya se preparan para una ola de más modelos EV en los próximos dos años, aunque no sabemos los planes puntuales para la región.