Al estar llena de persecuciones, la producción de la nueva película de James Bond, SPECTRE, gastó un total de $37 millones de dólares en automóviles destruidos.
Como es costumbre en una historia del Agente 007, las escenas de acción están presentes de principio a fin. Y obviamente los carros a toda velocidad no podían faltar para poner más adrenalina al rodaje.
Dentro la lista de vehículos destruidos destacan, siete de los diez Aston Martin DB10 que se fabricaron especialmente para el largometraje.
Otro de los deportivos que fueron reducidos a chatarra durante la filmación de la película esterilizada por Daniel Craig fue un Jaguar C-X75, así como uno de los Land Rover Defender desarrollados por JLR Special Operations.
Solo para tener una idea de la cantidad de recursos que se destinaron a los vehículos, los productores de SPECTRE utilizaron una séptima parte del presupuesto total.
Los autos de Spectre