En enero pasado se aplicó el último ajuste al precio de la gasolina en Colombia para cerrar la brecha de precio y acabar el subsidio a dicho combustible, que generó un enorme hueco fiscal estimado en cerca de 28 billones de pesos. Si bien desde entonces el precio interno de la gasolina fluctúa con los vaivenes del precio internacional, el costo de combustible es uno de los ítems que más sigue impactando las finanzas de los colombianos.
Por lo anterior, de la mano de Bridgestone, fabricante de llantas y que se orienta a ofrecer soluciones para una movilidad segura y sostenible, presentamos algunos consejos con los que se puede ahorrar gasolina y, a la vez, ser más respetuosos con el medio ambiente:
Mantén una carga adecuada
Llevar carga para la cual no está diseñado tu vehículo (excesiva) hará que aumente el consumo de combustible más de lo necesario. Siempre debes estar atento de la capacidad máxima de pasajeros e incluso de la capacidad de carga máxima (en el caso de las camionetas), pues el peso es un factor que influye considerablemente en el consumo de combustible, además de comprometer la seguridad del vehículo y de sus ocupantes.
No dejes “calentando” el auto
¿Estás esperando que tu carro se caliente o aguardas a que un amigo se siente en el asiento del copiloto? Sea cual sea el caso, los tiempos prolongados en que el motor está encendido mientras el vehículo está detenido requieren de una cantidad sustancial de energía del motor, lo que supone un desperdicio de combustible.
Si tu auto permanecerá detenido durante más dos minutos, una de las mejores cosas que puedes hacer para mejorar el consumo de gasolina es simplemente apagar el motor.
Acata el programa de mantenimiento sugerido por el fabricante
Si no sigues adecuadamente el programa de mantenimiento sugerido por el fabricante puedes tener efectos adversos en el rendimiento del vehículo, así como reducir el ahorro de combustible. Es muy importante que, por ejemplo, lleves a cabo la rotación y alineación de las llantas cuando sea necesario y hagas los cambios regulares de aceite del motor. Si estos mantenimientos no se realizan en el tiempo estipulado, el desgaste de algunos componentes del auto puede provocar un aumento progresivo en el consumo del combustible.
Mantén tus llantas infladas correctamente
Las llantas con presión de inflado insuficiente presentan mayor resistencia al rodamiento, lo que significa mayor trabajo del motor para mover el vehículo. Este esfuerzo extra aumentará el consumo de combustible. Para contar con la presión de inflado adecuada para tu vehículo, te recomendamos consultar el manual del propietario de tu carro para que te asegures de que tus llantas están correctamente infladas en todo momento.
Recuerda también que el exceso de aire en la llanta compromete el área de contacto al rodar, haciendo más insegura la conducción; ello también desgasta en forma desigual la zona de labrado.
Siempre que sea posible, mantén una velocidad constante
Los cambios de velocidad frecuentes y drásticos o las aceleraciones y frenadas bruscas y demandantes pueden hacer que tu vehículo consuma más combustible del necesario. También es importante que practiques hábitos de conducción segura, como observar y anticiparte a las acciones de otros vehículos y peatones en la carretera.
Hacer esto, puede ayudarte a mantener una velocidad constante y evitar así quemar combustible en exceso. En todo caso recuerda: manejar a la defensiva y sin afanes favorece el consumo y la seguridad en la vía.
Conduce dentro del límite de velocidad
Conducir dentro del límite de velocidad o por debajo de él, en lugar de hacerlo con exceso de velocidad, cuando viajes por carretera, puede reducir la cantidad de gasolina que necesita tu vehículo. Ten en cuenta que velocidades más altas tienden a hacer que el motor y otros componentes de tu auto trabajen más rápido, aumentando el consumo de combustible.
Planifica tu ruta
Las paradas y los arrancones constantes en el tráfico pueden hacer mella en el depósito de gasolina y en el motor de tu vehículo. Para evitarlo, planea la ruta que vas a seguir para ahorrar tiempo y dinero en combustible. Puedes, por ejemplo, evaluar los informes de tráfico, obras y accidentes antes de salir a la carretera y planear tu ruta al detalle para agilizar el trayecto y evitar paradas innecesarias, sobre todo su realizas viajes largos.
En el caso de desplazamientos urbanos es muy útil consultar aplicaciones que informen sobre la situación del tráfico en tiempo real. Recuerda que una ruta puede ser más larga, pero si se transita a un ritmo constante y moderado puede requerir menos gasolina que una ruta corta llena de detenciones constantes.
En lo posible, procura usar menos tu auto para desplazarte
A la hora de adquirir hábitos de conducción que permitan ahorrar combustible, quizá la opción más sencilla y obvia sea utilizar tu auto con menos frecuencia. Opta, si es posible, por utilizar el transporte público o utiliza un carro compartido. Para viajes más cortos, considera la posibilidad de caminar o de ir en bicicleta hasta tu destino,
Adoptar el hábito de conducir menos reduce el consumo de combustible y el gasto de gasolina, a la vez que disminuye las emisiones de dióxido de carbono y te puede llevar a adoptar un estilo de vida más saludable.