El Dodge Stealth fue un clon del famoso y muy avanzado Mitsubishi 3000GT (o GTO), el cual se comercializó en Norteamérica y que le sirvió a Chrysler para tener un modelo deportivo más avanzado que pudiera tener alguna ventaja contra algunas versiones del Mustang, el Camaro y otros deportivos que, por ese entonces, eran impulsados por motores de seis cilindros (Supra, 300ZX). En el caso del Stealth, era un V6 de tres litros, que con un sistema Twin Turbo podía alcanzar los 300 hp en las versiones R/T Turbo.
El rumor llega por parte de Motor Trend, quienes reportan que Dodge prepara un regreso del Stealth a las filas de la marca, aunque irónicamente haciendo un "sigiloso" (stealth, traduce "sigilo" en español) truco, que es poner el nombre de un deportivo a un SUV, que en este caso será electrificado.
El hasta ahora hipotético Dodge Stealth llegaría para sustituir a la Durango, uno de los modelos más populares de la marca, pero que, ante la oleada eléctrica, tiene un futuro algo incierto, mientras que Stealth podría desarrollarse sobre las plataformas más recientes de Stellantis (la WL del nuevo Grand Cherokee o la STLA Large) y que además dan cabida a distintos niveles de electrificación.
En cuanto a las posibilidades mecánicas, en el papel, Stellantis tendría varias opciones, claro que todo depende del tipo de vehículo que al final decida desarrollar (o no), pero “tranquilamente”, el nuevo motor Hurricane de seis cilindros en linea, combinado con diferentes tipos de asistencia eléctrica podría ser una de las opciones, si es que no optán por algo 100% eléctrico.