Se ventilará en las patallas el escandaloso caso de abuso de poder y malversación de fondos del que fuera conocido como el “asesino de los costos” (Cost Killer) y que durante su gestión las empresas Renault y Nissan tuvieron grandes momentos de gloria e inmensas ganancias.
¿Una conspiración?
Hay que conocer el caso a profundidad, por ello es una lástima reconocer que en el documental de Netflix solo se cuenta una historia en donde resalta lo indebido de la gestión de Carlos Ghosn, relatada por varios protagonistas importantes, como es el caso de Louis Schweitzer, quien fuera CEO de Renault de 1992 al 2005, y que fue quien reclutó a Carlos Ghosn (que antes trabajó en Michelin) para ingresar a la empresa francesa y gestionar una posible alianza automotriz, la cual finalmente se fraguó con la japonesa Nissan en 1999, mientras en 2016 se sumó otro fabricante japonés: Mitsubishi.
Otro gran testimonial dentro del documental es el de Hiroto Saikawa, quien tomó las riendas de Nissan después del arresto de Carlos Ghosn en 2018 y que al final también tuvo que dimitir a su cargo por recibir una compensación económica que no pudo explicar claramente.
Con el paso de los minutos se construye una narrativa contada por una secretaria ficticia, quien sirve como hilo conductor.