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Porsche Classic restaura un Carrera GT

A 15 años de su aparición, este auto aún se encuentra entre los súperdeportivos más emocionantes del mundo.

Porsche Classic restaura un Carrera GT

Antes conocer los detalles de este trabajo de restauración hecho sobre este Porsche Carrera GT hay que dejar en claro quien es su autor.

Porsche Classic, departamento perteneciente a Porsche, es el encargado de dar nueva vida a todos los vehículos de la marca alemana cuya fecha de finalización de producción supera los diez años. Estos incluyen a los legendarios 356, 914, 959 y 911, así como el 924, 928, 944, 968 Boxster -986-. Desde 2016, este satélite de la firma de Stuttgart también es responsable del suministro de repuestos originales del Carrera GT.

A sabiendas de toda la experiencia y garantía que ofrece este departamento de Porsche en la restauración de vehículos, un coleccionista propietario de un Carrera GT buscó al taller especializado para obtener una restauración y personalización excepcional de su deportivo. Como parte del proceso de rehabilitación, los técnicos e ingenieros desarmaron el auto por completo para regenerar cada una de las piezas o reemplazarlas si era necesario.

Una vez terminada esta labor sobre la carrocería del Porsche Carrera GT, así como el arreglo del chasis, transmisión y motor, el dueño solicitó a Porsche Classic que el vehículo fuera pintado con la pintura Oak Green Metallic, un color que apareció por primera vez en los modelos de Porsche en la década de 1970, pero que nunca estuvo disponible para el Carrera GT.

Este trabajo de latonería y pintura fue complementado por un set de rines de cinco radios de magnesio diseñados especialmente para este proyecto. Nadie podrá negar que estas ruedas tienen como inspiración los legendarios rines BBS, que tenían los radios pintados en oro y un anillo de borde pulido.

Para contrastar de manera perfecta con la carrocería, el tono de los rines, también fue empleado en las letras Porsche de las pinzas de freno, en el compartimiento del motor, en las carcasas de admisión e incluso en el interior, específicamente en el volante.

Con un motor V10 con 612 hp derivado de la Fórmula 1, un diseño superior y, no menos importante, la incomparable experiencia de conducción que ofrece, el Porsche Carrera GT sigue siendo un hito en el mundo de los super autos deportivos. De ahí, el énfasis de su propietario en convertir su ejemplar en una pieza más que única.

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