Ferrari no quiso esperar más para mostrar las primeras imágenes de su nuevo “cavallino rampante”: el Portofino. Más allá de la elegancia, tecnología y confort que presenta tanto en sus líneas exteriores como en su interior, lo que llama mucho la atención es su corazón.
El Ferrari Portofino cuenta con un impulsor V8 biturbo que eroga 600 caballos de potencia a 7.500 rpm y 560 lb-pie de torque – desde las 3.000 hasta las 5.250 rpm-. Su transmisión es automática de doble embrague, de siete relaciones. Acelera de 0-100 Km/h en 3.5 segundos y su velocidad máxima es de 320 Km/h.
Este incremento de potencia y torque -40 hp y 3.5 lbf, con respecto al California T, se ha conseguido gracias a una calibración del software del motor. Asimismo, su chasis es más liviano – a pesar de su mayor rigidez torsional-. Los ingenieros de la marca italiana le dieron al Ferrari Portofino una imagen imponente, sin perder su robustez.
Por esto… Ferrari es Ferrari
Para que el desempeño del Portofino fuera de lo mejor, el diferencial trasero eléctrónico de Tercera Generación (E-Diff3), le proporciona más grip al deportivo en carretera, y al mismo tiempo, le ayuda al conductor a no perder el control del carro cuando lo maneja a altas velocidades o en situaciones extremas.
A su vez, se implementó el –Electric Power Steering (EPS), con el propósito de reducir la relación de la dirección – fue casi del 7%-, lo que significa que hay una respuesta más directa y efectiva.
Puertas para adentro, en el Ferrari Portofino se destacan entre otros elementos: su sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil de 10.2 pulgadas, un gran volante deportivo con finos acabados y los asientos con ajuste electrónico hasta de 18 posiciones.
En el mes de septiembre durante el Salón Internacional del Automóvil de Frankfurt, se conocerán datos más concretos de este gran bólido italiano que despedirá con honores al California T.