Arturo Vidal es una de las principales figuras de la selección chilena, que en estos momentos está disputando la presente edición de la Copa América. Al parecer, su gambeta y visión de campo poco le sirvieron a la hora de ponerse tras el volante de uno de los superdeportivos más bellos de Maranello, la Ferrari 458 Italia.
El siniestro se produjo cuando el futbolista se dirgía de regreso a la concentración de su selección, luego de disfrutar la tarde libre en el casino junto a su esposa. Según los primeros peritajes de los carabineros, Vidal circulaba con su Ferrari 458 Italia a una velocidad de 160 Km/h al momento de impactar con otro vehículo, perdiendo así el control y quedando al costado del camino, con lesiones muy leves para el futbolista y moderadas para su esposa. Al contar como heridos, debieron someterse a pruebas de alcoholemia, que en el caso del conductor dieron positivas.
La Ferrari 458 Italia que destrozó Arturo Vidal cuenta con V8 de 4.5 litros atmosférico montado en posición central-trasera con inyección directa, el cual queda visible a través de su tapa transparente. Este impulsor desarrolla nada menos que 561 HP a 9.000 rpm, lo que implica que su potencia específica es de 127 CV/L, cifra sorprendente para un motor sin sobrealimentación. Esto le permite una aceleración de 0-100 km/h: en 3.4 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 325 km/h.
Todo indica que el jugador quedará desafectado del plantel y se perderá la Copa, aunque debería preocuparse más por los cargos por conducir alcoholizado y a gran velocidad, generando lesiones leves tanto a su mujer como al conductor del otro vehículo involucrado.