Parece que se termina una alianza histórica o al menos enfrenta un callejón sin salida. Renault está en negociaciones para vender sus acciones en AvtoVAZ, la empresa matriz de Lada, a un monto ridículo, de apenas un rublo.
Este anuncio lo hizo el Ministro de Comercio e Industria de Rusia, Denis Manturov. Aunque aún la marca no ha hecho declaraciones al respecto, lo cierto es que Renault inicia una retirada gradual de Rusia, por eso los franceses están en proceso de vender el 68% de su participación en AvtoVAZ y su fábrica de Moscú (donde se producen modelos como Renault Captur y Dacia Duster) a Nami, un instituto científico que depende del Ministerio de Industria ruso.
Eso sí, Renault tendrá una opción de recompra dentro de “cinco o seis años” de sus acciones, para recuperar su negocio. Aunque en todo caso, parece que el Kremlin saldrá ganando.
¿Por qué se produce esta venta?
Que el gobierno ruso compre una de las fábricas más importantes del país a un rublo no parece un mal negocio.
Hay dos motivos principales: el primero es la presión de las autoridades ucranianas y el otro es la escasez de componentes. En Ucrania, el pasado 23 de marzo, el ministro de asuntos exteriores, Dmytro Kuleba, no titubeó en llamar a un boicot mundial contra Renault por “su negativa a salir de Rusia”. Sin embargo, las fábricas de Renault/AvtoVAZ en Moscú ya estaban cerradas desde finales de febrero, puesto que las sanciones occidentales contra Rusia les impedían suministrar componentes.
Lo paradójico es que, gracias a que Renault cedió al reclamo de Ucrania y Occidente, el principal beneficiario de todo esto es Rusia, que puede nacionalizar a la marca automotriz más importante de su país por un precio simbólico. Si bien Renault podría recomprar sus acciones en cinco o seis años, de seguro no lo podrá hacer por el mismo precio que las deja. Al respecto, el mismo Denis Mantourov señala pícaramente: “Si hacemos inversiones durante este período, esto también se tendrá en cuenta en el valor de reembolso”.
El Lada Niva ya tiene una nueva generación, pero todavía hay demanda por el modelo clásico.
La futura dirección de AvtoVAZ estaría a cargo del mencionado instituto Nami, pero también intervendrá el conglomerado militar-industrial ruso Rostec, otro de los accionistas de AvtoVAZ. Al final, más allá de que pueda ser visto como una victoria ucraniana el hecho de forzar la salida de Renault de uno de sus mercados más importantes, este pase de manos podría ser una de las primeras represalias de Rusia contra las empresas occidentales.
Por si quedaban dudas, claro que es un mercado importante el que pierde Renault. Lada es la marca más importante de Rusia, con una cuota de mercado del 21% en vehículos nuevos. Al convertirse en el accionista mayoritario de AvtoVAZ en 2008, Renault abrió un mercado muy importante. Para darnos una idea, el año pasado Renault vendió en ese país unos 500.000 vehículos nuevos, casi tantos como los que vendió en Francia.