Aunque el mejor remedio para la limpieza, es no ensuciar, muchas veces es inevitable que algo se ensucie, sobre todo con los asientos de automóvil que constantemente están en contacto.
En el caso de los que son tapizados de tela, basta con pasar la aspiradora y se requiere algo más profundo, cepillarlos con agua y jabón o algún producto de limpieza especial, para quitar la suciedad.
Por su parte, cuando se trata de las tapicerías de cuero hay que tener un cuidado totalmente diferente para lucir lo mejor posible. Cuando la piel de los asientos entra en contacto con el sudor y el polvo, por ejemplo, puede mostrar signos de desgaste. Si a esto sumamos que el cuero que no ha sido acondicionado adecuadamente puede endurecerse y agrietarse a tiempo, la apariencia no será la mejor.
Para mantener en condiciones óptimas a los asientos, se recomienda seguir una serie de pasos que se muestran a continuación:
Aspirar el polvo
Lo primero que se aconseja es usar una aspiradora con una manguera de succión para limpiar los asientos del polvo, sobre todo en las grietas. Un compresor de aire también puede ser útil para aflojar la suciedad atrapada.
En este proceso es importante asegurar que el accesorio de la manguera no haga contacto con el cuero para evitar arañazos y otros daños.
Eliminar la suciedad
Una vez que se quitó el polvo por medio de la aspiradora, lo que se recomienda es pasar un paño de microfibra sobre los asientos para eliminar la suciedad de los asientos. Un cepillo de dientes también puede ser útil para deshacerse de la acumulación de la misma.
Para obtener los mejores resultados, lo ideal es humedecer el paño o cepillo de dientes con un producto limpiador formulado para cuero. En caso de que no querer gastar dinero, se puede utilizar una mezcla de vinagre y agua en proporciones iguales.
Es importante evitar rociar los asientos directamente con el líquido o la mezcla limpiadora. Asimismo, hay que tener cuidado especial con el cuero perforado, ya estos orificios pueden atraer la humedad. Cuando se limpie este tipo de cuero, hay que emplear menos liquido limpiador en el paño. Si se usa una gran cantidad de quitamanchas, la humedad puede ser absorbida por los asientos y causar problemas como el moho.
Prevenir las grietas y la resequedad
Con el paso del tiempo, el cuero puede perder algunos de sus aceites naturales, y esto puede hacer que tenga grietas y/o un aspecto reseco. Lo anterior se pude eliminar o evitar con el acondicionamiento regular.Como sucede con el cabello, el acondicionamiento puede ayudar a agregar humedad y flexibilidad. Lo mismo ocurre con el cuero, así que con este mismo procedimiento se puede prevenir la sequedad, por lo que los asientos darán su mejor aspecto.
En las tiendas de autoservicio o en establecimientos de refacciones y accesorios, se ofrecen acondicionadores para cuero. Aquí es importante evitar productos que contengan ingredientes como siliconas, ceras y destilados de petróleo, ya que pueden acumularse con el tiempo y opacar el acabado de la piel.
Para aplicar el acondicionador, hay verter una pequeña cantidad directamente sobre un paño limpio de microfibra. Una vez aplicado hay que dejarlo reposar aproximadamente una hora para antes de poner cualquier cosa en contacto con el cuero.
Durante este tiempo, se debe colocar el automóvil en un lugar sombreado, ya que la luz solar puede inhibir la capacidad del acondicionador para ser absorbido adecuadamente por el cuero. Después de la aplicación, se debe usar un paño limpio para pulir suavemente los asientos.
Si se desea la tapicería de piel tenga su mejor aspecto, el cuero debe acondicionarse dos o tres veces al año.
También es importante mencionar, que la facilidad de limpiar los asientos va en proporción con la regularidad que se haga. Cuanto más tiempo pasa, más difícil es quitarlo. Por lo tanto, es una buena idea limpiar los asientos de cuero al menos una vez al mes.