Hace medio siglo se realizó el primer vuelo supersónico de una aeronave comercial: el Concorde. Para celebrar dicha hazaña, Aston Martin y su división de personalización Q by Aston Martin, presentan la edición especial DBS Superleggera Concorde.
El DBS Superleggera Concorde Edition se une a los Vanquish S Red Arrows Edition, Vantage Blades Edition y V12 Vantage S Spitfire 80, como un miembro más de la gama conocida como Aston Martin Wings (alas), y que está inspirada en íconos de la aviación.
El modelo en cuestión fue comisionado a Q por Aston Martin Bristol, ciudad sede de la empresa donde se fabricaba el Concorde (que, recordemos, es una asociación industrial anglofrancesa) y es hogar del último Concorde de British Airways, que voló oficialmente el 26 de noviembre de 2003.
El DBS Superleggera Concorde utiliza materiales exclusivos y los combina con paquetes de diseño modificados. Exteriormente se distingue por decoraciones de aluminio, asociadas a unas líneas rojas pintadas sobre los vidrios laterales, así como un difusor y tomas laterales, que se combinan con el techo de fibra de carbono en negro, ambos colores oficiales de British Airways.
El famoso logo Speedmarque de British Airways se diseñó en cromo y se ubica sobre el alerón delantero, mientras que Q añadió elementos propios que identifican este auto como una pieza de colección.
En el habitáculo hay muchos elementos que evocan la aviación, como el logo de Corcorde en los asientos, un gráfico de velocidad Mach en el parasol del conductor, las levas del volante hechas con titanio extraído de un compresor del Concorde, los broches de los cinturones hechos de aluminio y otras decoraciones adicionales.
El motor del DBS Superleggera no cambia en este modelo: es un V12 5,2 litros biturbo que eroga 725 hp y 91,8 kg-m de torque, lo que le permite alcanzar 340 km/h y hacer un 0 a 100 km/h en respetables 3,4 segundos.
El Aston Martin DBS Superleggera Concorde no será una edición única, ya que el concesionario de Bristol planea vender unos cuantos: 10 unidades para ser exactos, a un precio no anunciado, aunque de seguro es muy alto.
