Cada tanto las marcas de lujo enfrentan en un dilema: apegarse a la opulencia clásica o darles paso a las nuevas tecnologías. Bentley no crea que eso sea una lección de blanco o negro, y por eso presenta el EXP 100 GT, un modelo conceptual con el que la marca celebra sus 100 años y proyecta su futuro.
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Las letras EXP aluden a “Experimental”, pero bien podrían ser de “Expandir”; este Bentley tiene medidas monumentales con 5.800 mm de largo (lo mismo que una RAM) y 2.400 mm de ancho, que no le permitirían circular en uno de sus ambientes naturales: Mónaco, pero seguramente sí en las adineradas autopistas de Medio Oriente.
La carrocería se destaca por sus líneas suaves y voluptuosas con cierta evocación al pasado, como los guardabarros traseros, que coquetean con el R-Type Contintental, o las luces delanteras, que evocan al Blower. Se destaca todo el trabajo de “cristalería”, tanto en el conjunto óptico, que se integra con una parrilla muy elaborada y retroiluminada, como en el techo, elaborado con prismas.
Lujo autónomo
Volviendo a la dicotomía clásico/moderno el Bentley EXP 100 GT lo soluciona ofreciendo volante y conducción autónoma. Además, los asientos se adaptan a la forma de sus ocupantes y al tipo de conducción.
Acá la tecnología está puesta en función de la comodidad y la ambientación, incluyendo un asistente personal en la consola central, que responde a los gestos y se encarga de modificar parámetros como luz, aromas, climatización y calidad del aire, según los deseos de sus ocupantes. Como si fuera poco, una serie de sensores biométricos se ocupan de ajustar el ambiente de acuerdo con la información recibida sobre la temperatura corporal y la presión arterial de los ocupantes.
Si bien materiales nobles como cobre, cristal y aluminio hacen parte de la cabina de este prototipo, la marca tuvo especial atención en cuidar el medio ambiente al utilizar pintura derivada de cáscaras de arroz, así como cuero sintético proveniente del proceso de elaborar vino o madera procedente de árboles caídos de forma natural. Un detalle muy interesante son las pantallas OLED en la parte interior de las puertas, que sirven para ambientar y reproducir películas.
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Queda un detalle que no es para nada pequeño, las puertas. El acceso al Bentley EXP 100 GT queda garantizado por dos inmensas alas con apertura tipo élitro, que miden dos metros de largo.
Eco-lujo
Construido en fibra de carbón y aluminio, este bólido inglés se mueve con cuatro motores eléctricos y un paquete de baterías que le permiten cifras increíbles: 700 km de autonomía, 0 a 100 km/h en 2,5 segundos y una velocidad máxima de 300 km/h.
