Durante la más reciente versión del Salón de Ginebra, Paolo Pinifarina, nieto de Battista “Pinin” Farina y presidente ejecutivo del carrocero italiano perteneciente al conglomerado Mahindra, indicó que están trabajando para convertirse en una marca independiente y en un constructor de automóviles con todas las de la ley.
Denominado Plan Montana, Pininfarina quiere lanzar al mercado cuatro a cinco autos eléctricos en el próximo lustro, todos bajo su propia marca que podría denominarse Pininfarina Automobili, e independiente del trabajo de autos eléctricos que está desarrollando para Mahindra.
Para este propósito se invertirían 400 millones de euros (US$500 millones) en la ampliación y modernización de la planta de San Giorgio, en Italia, y la de Uddevella, en Suecia, donde Pininfarina produjo para Volvo el descapotable C70.
El Pininfarina H2 Speed presentado hace unos meses en Ginebra sería el primer modelo de la marca. Se trata de un súper deportivo eléctrico que opera con una celda de hidrógeno, y del que se producirían sólo 12 unidades. Utiliza como base la plataforma de un prototipo LMP2, está carrozado en fibra de carbono y el tren motriz está compuesto por cuatro motores eléctricos, que en total erogan 660 caballos de fuerza.
Por detrás de este vendría un hypercar eléctrico desarrollado en conjunto con la empresa croata Rimac, a quien Pininfarina ha estado diseñados sus propios autos. Tendrá alrededor de 1.500 caballos de fuerza, por lo que no es descabellado pensar en que se aprovechará del tren motriz del Rimac C_Two, que en este caso supera los 1.900 Hp.
Un sedán eléctrico basado en el HK GT que presentó hace un tiempo estaría en la lista, así como un par de SUV de lujo, todos, obviamente, con tren motriz eléctrico.
Habrá aque esperar para ver cómo se desenvuelve esta historia.