Este auto del futuro salió a la luz en el Tokio Motor Show de 1991. Contaba con una carrocería de aluminio como el quattro Spyder que se develó en Frankfurt, pero con un motor de 12 cilindros en W de 6.0 litros que le daba una potencia de 509 caballos de fuerza. La transmisión era automática de cuatro velocidades. Aceleraba de 0-100Km/h en 3 segundos. Su velocidad máxima era de 340 Km/h y tenía un peso de 1,250 kilogramos- La carrocería completamente en aluminio le ahorro a este prototipo 150 kilogramos-, hecho que se convirtió en uno de los adelantos tecnológicos para este tipo de súperdeportivo e hizo recordar a las famosas flechas de plata de los años 30´s.
Otro adelanto que presentó el Audi AVUS quattro, fue su techo de cristal- hoy caballito de batalla de muchas marcas-, que permitía disfrutar la luz solar sin temor a que se calentará el habitáculo ya que evitaba que se produjera el efecto lupa. Asímismo, se encontraba la revolucionaria dirección integral – las ruedas traseras giraban a la par de las delanteras y al dar reverso se invertía el proceso para parquear sin problemas. El toque Premium se lo dieron sus puertas en forma de tijera, que asombro a propios y extraños en el Salón del "Sol naciente".
Audi había creado un monstruo de la velocidad que seguro competiría cabeza a cabeza con McLaren o Bugatti y por qué no, ser quien mandaba la parada en el rubro de "hijos del viento" o "rompe récords de velocidad. Se le denominó AVUS como homenaje al autódromo del sur de Berlín, lugar en el que realizaban las competencias de Auto Union antes de la Segunda Guerra Mundial.
Aunque no salió como carro de producción, la marca de los cuatro aros lo tiene muy presente como un Concept que ayudó para el desarrollo de modelos posteriores -Audi A8/carrocería, y el diseño de sus rines pasó la prueba para darle estilo, elegancia y distinción a los S3 y S4-. Quienes quieran ver esta pieza automotriz pueden observarla en el Museo de Audi en Ingolstadt, Alemania.
Vale la pena mencionar que en el circuito de AVUS tuvo lugar el Gran Premio de Alemania de Fórmula 1 en 1959.