Al realizar una limpieza interna del motor, usted permite que toda la suciedad que se ha acumulado en el motor salga del mismo y quede libre de cualquier impureza.
Un limpiador de motor (engine flush en inglés) tiene ciertos químicos que al ser introducidos en el propulsor, se dejan reposar para asegurar que los agentes de limpieza alcancen los lugares que normalmente el aceite no logra ir. Después éstos son drenados justo como en un cambio de aceite. De hecho una limpieza interna de la máquina se lleva acabo normalmente después de extraer el aceite viejo y antes poner el nuevo.
Cabe aclarar que ciertos fabricantes automotrices no recomiendan usar un limpiador de motor – señalan que con un cambio de aceite a tiempo y con lo avanzado de la tecnología en los nuevos motores no hace falta- de hecho afirman que si se realiza el procedimiento se podría hasta dañarlos.
Teniendo esto en mente, a continuación le damos los cinco beneficios:
1. Remueve depósitos que se acumulan
El aceite protege y lubrica el motor desde el momento que lo prendemos. Sin embargo si maneja tramos cortos, estando en el tránsito acelera y frena, algunas partículas en el aceite se convierten en depósitos dentro del motor, los cuales se acumulan con el tiempo, causando que se limite el flujo del aceite.
Una limpieza del motor puede mover esos depósitos, abriendo pequeños pasajes que las impurezas tenían tapados y algunas de ellas estaban flotando con el propio aceite. Removiendo esas impurezas, el aceite fluye libremente, lubricando y protegiendo del desgaste o posible daño del motor; además de permitir que las partes del mismo se muevan como deben.
2. Casi como empezar desde cero
Mientras que muchos vehículos son conducidos y mantenidos regularmente como se debe no necesitan un servicio de limpieza interna; sin embargo hay algunos casos en que hacérselo puede ayudar:
Autos con un récord de mantenimiento desconocido. Si acaba de comprar un vehículo viejo a un súper precio, pero no sabe cómo lo cuidaban; aquí una limpieza del motor seguido de unos litros de aceite fresco puede ahorrarte severas molestias después.
Autos que fueron ajustados o tuvieron alguna reparación interna. En este caso una limpieza de motor podría lavar y remover residuos de partículas, antes de añadir el aceite nuevo.
Autos con largos intervalos entre cambios de aceite. Si no se hace frecuentemente el servicio de aceite en el vehículo, esto ocasiona que se formen depósitos siendo que el aceite se ensucia cada vez más y más. Aquí una limpieza interna del motor ayudaría a remover esos residuos.
3. Mantener el aceite limpio
Al hacer una limpieza del motor permite que el aceite nuevo se conserve.
Cambiando el aceite, sin realizar una limpieza de motor, pasa que el aceite nuevo recoja los viejos depósitos así como el lodo, ocasionando que estén circulando dentro del propulsor. Muy pronto el aceite fresco se ensuciará como el que removió.
Si hace una limpieza de motor hará que los intervalos de cambios de aceite sean más largos, especialmente si el mantenimiento al mismo no ha sido perfecto.
4. Limpiar lo que se le escapa al filtro
La mayoría de los filtros remueven partículas tan pequeñas como .03 milímetros, pero hay otras más diminutas circulando en su motor que incluso los mejores filtros no pueden remover. Éstas con el tiempo también pueden ocasionar desgaste, que se forme lodo y depósitos.
Si estas partículas llegan a ser excesivas, el aceite nuevo no las podrá remover. Pero los químicos usados en los limpiadores de motores, pueden detener el deterioro y darle la oportunidad al aceite fresco trabajar apropiadamente.
5. Limpiar las partes del motor
Si la suciedad en el aceite del motor es demasiada, las partes del motor se pueden atascar. Un limpiador de motor remueve la mugre y hará que las piezas trabajen suavemente. Con esto el propulsor será más eficiente, otorgando la potencia y eficiencia de combustible que tenía casi como cuando salió del piso de venta.
En autos viejos, no obstante, el líquido de limpieza asea muy bien los anillos del pistón, válvulas entre otras partes. Algunas veces, la suciedad actúa como yeso en piezas no metálicas como sellos de goma que se han quebrado con el tiempo. Atildar la impureza expone las grietas y puntos débiles de esas piezas.