Si no conseguiste salir con tu "crunch" en el Día de San Valentín, no te angusties, hay "alguien" que también necesita recibir amor y se lo merece: ¡tu auto!
No lo digo sólo en broma, porque, honestamente, ese compañero de aventuras, que desinteresadamente te acompaña por la vida, merece más tiempo que tu “ex”, así que pon atención, porque cuando quede reluciente, igual hasta podrás conseguir una cita romántica inesperada.
1.- Bien bañado, encerado y perfumado
Con este clima tan "chocoloco" que tenemos en Colombia, los autos se ensucian por donde anden. Así que acude a tu autolavado de confianza, pide un paquete con cera (para darle brillo a la carrocería) y aspirado de interiores, porque seguramente, también es un desastre. Ordena ese baúl, pon un buen ambientador y verás como inmediatamente tu auto “revive”.
2.- Que quede bonito
Consiegue un detallador de interiores (quick detailer) y un restaurador de molduras, paño de microfibra, espoja y manos a la obra. Una vez que la carrocería esté limpia, el detallador quitará las marcas de jabón o lluvia, aportará más brillo a la carrocería. Por su parte, los plásticos y las molduras de los guardabarros, parrilla, espejos, etc. recobrarán su aspecto natural, casi como nuevos.
3.- Zapatos bien limpios; rines y llantas
Si no tienes con quien ir al cine y te sobra tiempo, desmonta los rines y dale una lavada a fondo con jabón especial. Si tienes hidrolavadora todo será más fácil. Aprovecha también para lavar la cara interior de las llantas y humectarlas. Vuelve a montar los cuatro neumaticos y aplica abrillantador especial. Esto, querido amigo(a), equivale a andar por la vida con los zapatos o tenis limpios. Tenemos un artículo dedicado a este tema, por si quieres saber cómo limpiar adecuadamente las llantas.
4.- Lo que importa es el interior
Si eres de los que come galguerías y pasabocas para soportar los trancones, seguramente los asientos, el volante, la palanca, los controles y todo, en general, debe estar “considerablemente” sucio. Una solución fácil y barata es agua, trapo y jabón corriente. Hay quienes usan hasta brochas para llegar a las zonas o ranuras más complicadas. Dependerá del grado de suciedad. Limpia bien y al final aplica protector abrillantador para plásticos, ¡la diferencia será abismal!
5.- Bien perfumado: filtro de polen y aerosol refrescante
Es común que después de cierto tiempo el habitáculo comience a oler mal. La causa puede ser el filtro de polen o partículas interior. Cambiarlo es muy sencillo y barato, solo cerciórate de la aplicación para tu auto. Si quieres ir al siguiente nivel, compra un aromatizante para interiores y el habitáculo de tu auto estará listo para consentir a tu acompañante.
Pocos sentimientos son tan gratificantes como trabajar en el auto propio. Es como una manera de reconciliarse con él o ella, los resultados serán notorios, creeme, los cambios se notarán y, quizás, hasta una cita consigas al final de la semana.