Un estudio de la Universidad de Nueva York con sede en Shanghái, plantea la existencia de la posibilidad de mejorar nuestras habilidades al volante mediante los simuladores de manejo que encontramos en los videojuegos. Según la alta casa de estudios, éstos nos ayudan a enriquecer la coordinación visual y motriz.
Honda decidió realizar una prueba juntando al mejor gamer profesional y a un piloto experimentado. La idea de la marca japonesa era realizar una competencia en donde el protagonista sería ni más ni menos que el recientemente lanzado Civic Type R.
La carrera se llevó a cabo en el circuito de Atlanta y en el edificio de Microsoft Turn 10 Studios, responsables del videojuego Forza Motorsport. Graham Rahal, piloto de IndyCar, y Peter Jeankins, gamer profesional, fueron los contendientes. La carrera tenía algo que es innegable: no es lo mismo manejar en la vida real que de manera virtual, ya que en la simulación no hay riesgo de vida.
R vs R
