Ford Escape –Kuga para el mercado Europeo- se ha convertido en uno de los pilares de la marca del óvalo azul en todo el mundo, superado únicamente en ventas por el F-150 y toda la serie F de camiones. Es por eso que después de tres años se actualiza tanto estéticamente como en motores y tecnología.
Por fuera adopta una apariencia más parecida al nuevo Ford Edge con un frente más redondeado, parrilla hexagonal (que además es activa, es decir, que mueve unas persianas para permitir o cerrar el paso del aire según se necesite) y faros más cortos. Atrás, los stops fueron rediseñadas y son de LED, además las fascias son completamente nuevas. De hecho, el nuevo Escape solamente comparte con su predecesora el techo, las puertas y vidrios, todo lo demás es nuevo.
Por dentro los cambios más grandes están en la consola central donde encontramos unos portavasos, un descansabrazos nuevo, la ausencia del freno de mano físico que fue sustituido por uno eléctrico, nuevo volante y salidas del aire acondicionado nuevas.
El sistema de infoentretenimiento fue actualizado al SYNC3 con una mejor usabilidad, respuesta de la pantalla sensible al tacto y además incorpora por primera vez el sistema SYNC Connect que le permite al usuario abrir y cerrar los seguros por medio de su celular, encender el motor, monitorear la presión de las llantas, el nivel de los fluidos y el estado de la batería. Finalmente también podrá ubicar el vehículo en tiempo real, todo a través de la nueva app para Smartphones.
En la parte mecánica se ofrece con el motor cuatro cilindros 2.4L aspirado naturalmente y el 2.0L turbo EcoBoost. Ahora, el Ford Escape 2017 se anuncia con un 1.5L turbo EcoBoost que sustituye al 1.6L y que entrega 180 Hp y 184 Lb-pie de torque, además de un 2.0L EcoBoost con 245 caballos y 275 Lb-pie de torque.
¿Le parece atractiva la renovación de la Ford Escape?
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