Después de un año de prueba con estos vehículos, fue evidente la disminución de las emisiones de CO2, en la capital colombiana por lo que muy pronto se espera que circulen más taxis eléctricos en la ciudad.
El proyecto que es liderado por la Alcaldía Mayor, en cabeza del señor Gustavo Petro, busca darle otra opción de movilidad a los bogotanos, además de preservar el medio ambiente.
Los vehículos empezaron sus operaciones desde el 2 de septiembre del 2013, y se estima que con la flota de 38 taxis que actualmente se encuentran circulando, Bogotá ha dejado de recibir 157 toneladas de CO2. A la fecha han recorrido un total de 1.3 millones de kilómetros.
Poner a rodar los buses eléctricos será otro paso de gigante, para que Bogotá, de a poco vaya recupere su salud ambiental y haya más pie de fuerza para movilizarse.
