Volkswagen nos llevó hasta la hermosa ciudad de Bariloche, donde por estos días presenta a la prensa local y mundial su flamante pick-up Amarok. El motivo de la convocatoria, tomar contacto con este nuevo producto de la casa alemana que promete revolucionar el cada vez más competitivo segmento de las pick-ups medianas.
Según Harald Schomburg, responsable de Ventas y Marketing de Volkswagen Vehículos Comerciales, la iniciativa de fabricar una pick-up de 1 tonelada responde a las demandas de las concesionarias de América Latina y Sudáfrica que desde hace tiempo pedían un producto de estas características. Además, el motivo se fundamenta en que "sabemos hacerlo" gracias al amplio conocimiento de la marca en vehículos comerciales y sistemas de 4WD.
La nueva pick-up fabricada en Argentina para el mundo, que cuenta con una capacidad de carga real de 1,15 toneladas, fue construida sobre los pilares de confiabilidad, confort y fuerza con una oferta de motores modernos, gran seguridad y apuntando al placer de conducir. En palabras de Schomburg, la Amarok "es la mejor pick-up de estos tiempos" y buscará jugar un papel de líder en todos los mercados.
Una vez llegados al aeropuerto de Bariloche, nos subimos a una Amarok 4 Motion doble cabina con motor 2.0 TDi biturbo de 163 Cv y caja de sexta, con el nivel de equipamiento más completo (Highline) y enriquecida con algunos opcionales como las llantas de 18 pulgadas, barra antivuelco y cobertor de carga. Uno de los opcionales que le faltaban a nuestra unidad fueron los estribos, muy recomendables para poder ingresar más fácilmente dentro de la camioneta.
Por afuera la pick-up se ve realmente atlética, con un look muy moderno, fundamentalmente en el frontal, y robusta a la vez, gracias a las grandes salpicaderas bien marcados. Respecto del diseño, hay que decirlo, se nota desde prácticamente todos los ángulos la "inspiración" en su principal rival, la Toyota Hilux.
El interior es muy espacioso, simple y minimalista, con materiales correctos para lo que se puede esperar de un pick-up, y niveles de terminación muy buenos, superiores a la media.
El cuero en tapizados y paneles de las puertas, brindan una atmósfera muy agradable y nos hacen sentir, salvando las distancias, con una Touareg por poner un ejemplo, como si estuviéramos en un SUV muy al estilo del la Lincoln Mark LT.
El programa original de 270 kilómetros, que fue reducido a unos 200 km aproximadamente debido a dos piquetes de taxistas pasando Villa La Angostura, comenzó por ruta camino a Fortín Chacabuco, donde nos esperaba, además de un típico asado argentino, una pista de 4x4 especialmente preparada para el evento.
Asistidos por un apasionado ingeniero alemán, que en un duro inglés nos explicaba todos y cada uno de los dispositivos electrónicos y de asistencia a la conducción, iniciamos nuestra aventura off-road. La Amarok dispone de un sistema de tracción 4x4 temporal (high), que se acciona mediante un botón ubicado al lado de la palanca de cambios y ofrece también la función de caja reductora o baja (4x4 Low) con la que virtualmente puede atravesar cualquier tipo de terreno.
En baja, la camioneta es imparable, pudimos trepar pendientes de más de 30° (puede superar pendientes de hasta 45° según informa la marca) en las que sólo veíamos el cielo, sin inconvenientes y ayudados por el asistente de arranque en pendientes. El sistema de control de descensos, por su parte, hace que las bajadas sean un juego de niños. La Amarok baja sola sin necesidad de presionar ningún pedal, pudiéndonos concentrar exclusivamente en el volante.
Otros elementos, todos activados desde teclas junto a la selectora, incluyen un sistema de bloqueo de diferencial para el eje trasero, ESP off-road y ABS off-road. Este último reduce de manera significativa las frenadas fuera del camino en ripio, arena o barro. Hay que probarlo, como nos decía nuestro instructor, para reconocer su eficacia. El último de los desafíos antes de volver a la ruta, el cruce de un afluente de un río con piso de piedra, que la camioneta superó sin inconvenientes.
Ya de regreso en caminos asfaltados y rodeados de un paisaje de una belleza inigualable rumbo hacia el descanso en el Hotel Llao Llao, la Amarok circula con un confort de marcha más típico de un sedán que de una "chata". Pasar los cambios con la corta y precisa palanca de cambios de seis relaciones es una delicia (a diferencia de las clásicas selectoras de recorrido largo que comúnmente equipan las pick-ups) y el motor 2.0 TDi biturbo de 163 caballos y 400 Nm, con el que está disponible inicialmente, le queda verdaderamente muy bien.
Más adelante se sumará a la oferta de motores una nueva mecánica diésel, turbo de 2.0 litros con 122 Cv y una variante a gasolina, 2.0 TSI con 160 Cv. Futuras novedades adicionales incluyen la llegada de versiones con tracción trasera 4x2, carrocerías de cabina simple, y la posibilidad de una versión carrozada (como la Hilux SW4), además de transmisiones automáticas (¿multitronic de 8 velocidades tal vez?).
Los precios para México aun no están definidos y se darán a conocer hasta la segunda quincena de este mes de febrero.
Con la Toyota Hilux en la mira, pero con otros rivales también de peso, como la Nissan Frontier, la Ranger de Ford y la Chevrolet S-10, la Volkswagen Amarok llega al mercado con la ambición de ser el nuevo referente del segmento.